Luis Manuel Otero Alcántara, líder del Movimiento San Isidro, aseguró ayer que hoy irá para el Capitolio a pedir respuestas a la Asamblea Nacional del Poder Popular por la agresión del ministro de Cultura, Alpidio Alonso, a jóvenes que protestaban pacíficamente el miércoles frente al MINCULT, contra las detenciones arbitrarias y el acoso policial a periodistas, activistas y artistas cubanos, que no comulgan con las ideas del gobernante Partido Comunista de Cuba.
"Convoco a todos los cubanos por el derecho a tener derechos", dijo en alusión a Hannah Arendt y a la frase popularizada en Cuba por Oswaldo Payá, que aparece en el discurso que el líder opositor dio el 17 de diciembre de 2002, cuando recibió el Premio Sarajov y que fue medular en su pensamiento político.
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"Todo el que quiera sumarse puede hacerlo" y quien pueda pasar a llevar agua o comida, es bienvenido, añadió en una directa en Facebook.
Otero Alcántara saldrá a protestar, según avanzó, a las 12:00 horas de hoy. Su idea es sentarse en las afueras del Capitolio, que es un espacio público, hasta que algún funcionario cubano de la Asamblea Nacional del Poder Popular decida bajar a dar explicaciones por la violencia ejercida en el MINCULT.
Esta vez no escribirá una carta a las instituciones públicas cubanas porque ha comprobado que no sirve de nada. El Estado no le ha contestado nunca y por eso reclamará explicaciones a una institución que supuestamente representa a todos los ciudadanos del país.
Frente al Capitolio permanecerá sentado si antes no lo detiene la Seguridad del Estado para impedir que ejerza su derecho a la libertad de expresión.
En principio no tiene previsto llevarse el celular para evitar que se lo rompan, reseteen o se lo decomisen sin orden judicial.
No se trata, explicó, de una bravuconada, sino "de un ejercicio de supervivencia". "Voy a salir por mis hijos, por mis amigos y por mí", señaló.
Y lo va a hacer porque dice que si permitimos que un ministro de Cultura agreda a artistas, mañana "Díaz-Canel puede salir a fusilar", insistió.
Fue lo que pasó con los fusilamientos por los sucesos de la lanchita de Regla en 2003, cuando el Gobierno de Fidel Castro mató a tres jóvenes de piel negra (Lorenzo Popeyo, Bárbaro Sevilla y Jorge Martínez) por intentar huir de Cuba hacia Estados Unidos, desviando la embarcación que une las dos orillas de la Bahía de La Habana.
Para Luis Manuel Otero Alcántara es importante comprender que un ministro de Cultura está para entender y atender todas las manifestaciones del arte, desde el reguetón hasta la música clásica.
No se puede permitir, recalcó, que agreda a artistas y que maltrate a mujeres porque si Alpidio Alonso ataca a jóvenes que se manifestaron pacíficamente frente al MINCULT y no pasa nada, ¿qué ejemplo da a la Policía?, se pregunta.
El activista asegura además que está cansado de que se cometan desmanes en Cuba y que no pase nada, como cuando la directora de Comunicación y Contenidos del ICRT, Yusimí González, hizo un comentario homófobo fomentando la censura de "las voces platinadas" de determinados locutores cubanos. Lo denunciaron, pidieron su dimisión y el Gobierno hizo oídos sordos.
Luis Manuel Otero sabe que es muy probable que hoy sea detenido. Ya lo han arrestado entre 40 y 50 veces desde que protestó contra el Decreto 349 y además lo encerraron en Valle Grande y le cortaron el pelo, pero aún así él saldrá esta mañana hacia el Capitolio porque no concibe un país en el que su hijo puede ser maltratado. "Es un gesto de supervivencia", reiteró.
En su opinión, que el Gobierno obligue a los cubanos a hacer colas diariamente durante la pandemia del coronavirus es un crimen de lesa humanidad y tienen que responder por ello.
Asimismo, el artista dice que ha visto muchas más imágenes de lo ocurrido el 27E frente al MINCULT y no se le pasa la indignación de ver y escuchar testimonios de jóvenes con dedos partidos y fracturados o mujeres agredidas sólo por querer leer poemas de Martí frente a la sede del Ministerio de Cultura.
"Si Martí hubiera estado aquí, estaría hoy aquí conmigo", apuntó Luis Manuel Otero Alcántara, que por otra parte, mostró su desacuerdo con los 15 años de cárcel que el Gobierno cubano ha impuesto a los jóvenes de Clandestinos por rociar bustos del Apóstol con sangre.
Sobre el margen de 24 horas que dio para que dimitiera el ministro Alpidio Alonso tras las agresiones en el MINCULT explicó que lo hizo porque quería comprobar que no era una indignación pasajera. Transcurrido ese tiempo sin que el titular de Cultura de Cuba renuncie a su cargo, el líder del Movimiento San Isidro ha decidido salir a protestar a la calle.
Mientras esto ocurre, en la televisión nacional cubana continúan los ataques a los jóvenes que protestaron en el MINCULT, a quienes tachan de "mercenarios" por no seguir directrices del Partido Comunista.
En este sentido, Otero Alcántara, que es acusado habitualmente de "terrorista"en la televisión estatal, mostró en la directa de ayer las puertas de su casa abiertas sin que ningún miembro de las Fuerzas y Cuerpos del Estado haya ido a detenerlo por ese delito.
Lo que sí ha hecho la Policía política cubana es ponerle una cámara apuntando hacia su casa para mantenerlo vigilado las 24 horas del día.
Luis Manuel Otero es uno de los 14 cubanos que a finales de noviembre se encerraron en huelga de hambre en Damas 955 (la casa de Otero) para protestar contra las tiendas en dólares a las que los trabajadores cubanos que viven de su sueldo no pueden entrar porque los salarios en Cuba se pagan en pesos.
Esta huelga luego reclamó la liberación de Denis Solís, condenado a ocho meses de cárcel por un supuesto delito de desacato a un policía, que entró en su casa a grabarlo con un celular sin una orden judicial.
Los huelguistas de San Isidro fueron desalojados por la fuerza por presuntos médicos que pretendían evitar la propagación de epidemias. Muchos de los agentes que formaron parte del operativo policial no llevaban puesto el nasobuco.
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