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Un grupo de jóvenes de la parroquia Nuestra Señora del Carmen, en Santa Clara, repartieron alimentos calientes a personas sin techo y desamparadas que pernoctan en las calles de la ciudad.
Una publicación de la Diócesis de esa provincia cubana señala que en la noche del 27 de diciembre, luego de celebrar la cena de Navidad, los jóvenes "recorrieron las calles santaclareñas en busca de los pobres, los excluidos, los deambulantes, esos que a los ojos de muchos pasan desapercibidos en nuestras calles"; y a quienes repartieron "un plato de comida caliente".
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La parroquia destacó que la acción lleva "el mensaje del Evangelio".
Cuba vive una grave crisis económica marcada por una acelerada inflación, que ha generado una escalada de la pobreza y la mendicidad en la isla.
En ese contexto varias Iglesias cubanas han tomado iniciativas similares. Esta semana trascendió que la Iglesia Cristiana Pentecostal de Cuba, ofreció cenas de Navidad para personas necesitadas que pernoctan en las calles de la ciudad de Camagüey.
"Jóvenes apasionados por las almas salieron a evangelizar con amor y unción, repartiendo alimentos a necesitados en las ciudad de Camagüey. Bienaventurado el que piensa en el pobre", señaló en Facebook la Iglesia Cristiana Pentecostal.
En las imágenes de ambas iniciativas puede verse que la mayoría de las personas sin hogar que permanecen en las calles son ancianos.
Los jubilados son en Cuba uno de los grupos de población más golpeados en la actual crisis, sus pensiones no alcanzan para cubrir las necesidades básicas para la vida y dependen de otras personas. Al no tener apoyo en sus familias, o estar solos en el país, muchos terminan en la calle.
Además, la galopante inflación –Cuba es la tercera mayor inflación del mundo actualmente– empuja a miles de familias a la pobreza.
La semana pasada el economista Elías Amor Bravo alertó que el 2023 estará cargado de incertidumbres y empobrecimiento, a pesar de que el ministro de Economía Alejandro Gil y el gobernante Miguel Díaz-Canel anuncien lo contrario en sus informes de cierre de año.
Amor señaló que los 53,931 millones de pesos que prevé el gobierno en el PIB del 2023, están por debajo en casi siete mil millones al PIB de 2019. Hay un considerable retraso con respecto a otros países de la región y notables dificultades para superar la crisis desatada durante la pandemia del COVID-19.
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