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Yunia Doval volvió a difundir en redes otro emotivo mensaje sobre la muerte de su joven sobrino, Leo Alejandro Doval, en el incendio de la Base de Supertanqueros de Matanzas, ocurrido a principios de agosto último.
“Si volvieras aunque sea por un segundo.... te abrazaría tan fuerte que te dejaría sin aliento. Daría un trozo de mi piel, un minuto entero de mi oxígeno, mis brazos, mis piernas... cuánto daría, mi tierno sobrino... Si volvieras!”, dice el mensaje que compartió este jueves en su perfil de Facebook la desconsolada tía del joven cubano, de 19 años, que cumplía el Servicio Militar Obligatorio en el Comando de bomberos del Aeropuerto Juan Gualberto Gómez, de Varadero, en Matanzas.
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Yunia, a poco de conocerse la tragedia y de saber que su sobrino estaba entre los desaparecidos tras la explosión de un segundo depósito de combustible en la zona industrial matancera, donde ocurrió la tragedia, difundió un primer mensaje en el que expresó su indignación por la muerte de su familiar y explicó que el joven de apenas 19 años no tenía que haber sido enviado al lugar del siniestro.
"Yo no te quiero héroe, mi niño, te prefiero cobarde!", afirmó en un emotivo post de Facebook.
"Siempre admiré tus valores y sabemos tu familia que no eres de los que corren, sin imaginar que hoy, preferiría que hubieses huido. Sentiría igual orgullo si llegaras ahora diciendo que de repente te tornaste cobarde, rebelde, desafiante y te bajaste del camión de bomberos, porque en definitiva, tú no eres uno de ellos. Tú serías un neurocirujano!", expresó Doval.
En su post agregó que Leo "era un niño cariñoso, entregado al estudio, a los amigos y a la familia".
"Me rehúso a saberte muerto! No permitas que olvide tu olor, tu voz, la sensación en mis mejillas de tus besos y el calor de tus abrazos sinceros", subrayó Doval.
También ella denunció en otros medios muchos jóvenes enviados a la zona de desastre tenían una preparación como bomberos de apenas 15 días, por lo que no debieron haber sido enviados a una misión de tal magnitud.
En declaraciones a Radio Televisión Martí, Doval argumentó que ya no quedan esperanzas de rescatar con vida a ninguno de los desaparecidos en el siniestro, en su mayoría jóvenes inexpertos que pasaban el Servicio Militar Obligatorio.
"Ahí es imposible encontrar sobrevivientes. Ni siquiera hay esperanzas de encontrar el cuerpo", aseguró.
También la madre de Leo Alejandro, tras conocerse su desaparición, publicó un desgarrador texto para despedirse de su hijo en el que evocó los sueños de su “niñito con alma de viejo” y enumeró tiernos momentos familiares sin los que asegura no sabe cómo va a poder vivir a partir de ahora.
“¿Cómo logro seguir sin ver todos tus planes cumplirse, si ya tenías pensado como irías el primer día a Ciencias Médicas para hacerte Doctor en Medicina como a todos nos decías y un gran Neurocirujano. Ya lo tenías todo preparado, tu uniforme, tus zapatos, tu mochila y yo te decía ‘¿Pipo y las libretas?’ y me decías ‘sí es importante, pero más importante es grabar las clases para después quemarme las neuronas en las noches en el cuarto’”, evocó en esa ocasión Vivianne Pérez De Prado.
A un mes de la tragedia, también sus compañeros del preuniversitario vocacional de Matanzas, Carlos Marx, hicieron una emotiva carta de homenaje a Leo Alejandro en la que expresaron su profundo dolor por su temprana partida.
“Hoy te recuerda tu escuela, tus profesores, tu ciudad, absolutamente todos te necesitamos porque sin ti no es lo mismo, los chistes y las risas no son iguales, el mundo necesita de tu dedicación y valentía, se necesitan muchas personas como tú, con todo ese amor en el corazón”, dice la misiva.
También en las emotivas palabras, sus compañeros de aula dicen que aún no pueden superar su partida y que el vacío que les dejó es “irreparable”.
El joven Leo Alejandro Doval falleció en la madrugada del 6 de agosto, cuando explotó un segundo tanque de fueloil, muy próximo al lugar desde donde intentaban sofocar las llamas del primer depósito incendiado el día anterior, para evitar que la combustión se propagara.
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