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Yunia Doval, la tía de Leo Alejandro Doval, uno de los desaparecidos durante el incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas, expresó su indignación por la muerte de su sobrino y explicó que el joven de apenas 19 años no tenía que haber sido enviado al lugar del siniestro.
"Yo no te quiero héroe, mi niño, te prefiero cobarde!", afirmó la mujer en un emotivo post de Facebook.
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"Siempre admiré tus valores y sabemos tu familia que no eres de los que corren, sin imaginar que hoy, preferiría que hubieses huido. Sentiría igual orgullo si llegaras ahora diciendo que de repente te tornaste cobarde, rebelde, desafiante y te bajaste del camión de bomberos, porque en definitiva, tú no eres uno de ellos. Tú serías un neurocirujano!", expresó Doval.
En su post agregó que Leo "era un niño cariñoso, entregado al estudio, a los amigos y a la familia".
"Me rehúso a saberte muerto! No permitas que olvide tu olor, tu voz, la sensación en mis mejillas de tus besos y el calor de tus abrazos sinceros", subrayó Doval.
Recientemente, la tía de la víctima denunció que muchos jóvenes enviados a la zona de desastre tenían una preparación como bomberos de apenas 15 días, por lo que no debieron haber sido enviados a una misión de tal magnitud.
En declaraciones a Radio Televisión Martí, Doval argumentó que ya no quedan esperanzas de rescatar con vida a ninguno de los desaparecidos en el siniestro, en su mayoría jóvenes inexpertos que pasaban el Servicio Militar Obligatorio.
"Ahí es imposible encontrar sobrevivientes. Ni siquiera hay esperanzas de encontrar el cuerpo", aseguró.
El incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas ocurrió el viernes en la tarde por la caída de un rayo sobre un tanque con miles de galones de crudo.
De inmediato el Cuerpo de Bomberos de la provincia fue enviado a la zona de emergencia pero a las 04:00 am del sábado el incendio avanzó hacía un segundo tanque cargado con fuel oil que explotó, dejando 14 desaparecidos y un muerto.
Este miércoles las autoridades anunciaron que tras controlar gran parte del fuego, estaban "listos" para iniciar la búsqueda de las víctimas, de las cuales el gobierno se ha negado a ofrecer nombres y edad.
Sin embargo, los familiares han confirmado en redes sociales el fatal desenlace de los desaparecidos.
Este miércoles otra madre cubana confirmó que su hijo de 23 años también murió en el incendio de la refinería matancera. Elizabeth Leyva, la mamá del joven cubano Luis Ángel Álvarez, dijo en una emotiva publicación que se "ha quedado a oscuras", tras confirmar la noticia.
El joven de apenas 23 años formaba parte del grupo de bomberos que junto con Leo fue enviado a la zona cuando explotó el segundo tanque de combustible.
Un bombero que sobrevivió relató: "Estábamos muy cerca de los tanques, todo fue muy rápido, en menos de 10 segundos las personas empezaron a quemarse, sentías que el vapor te quemaba".
Explicó que al cambiar el viento en la Bahía de Matanzas todo se precipitó. "Al cambiar el viento en menos de cuatro o cinco segundos hacia el norte fue lo que hizo explotar la primera caldera por completo y pasar todo el calor hacia el segundo tanque, y ahí todo fue seguido. El vapor cambió por completo, la radiación fue la que más nos quemó".
"El factor humano fue el que nos hizo virar atrás y seguir sacando a las personas que pudimos. Por lo menos en el carro que nosotros nos fuimos logramos llevarnos siete personas", dijo el rescatista.
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