Cuba proyecta el arribo de más de un millón de turistas a la isla durante este verano, según autoridades del país.
Durante el debate de la Comisión de Atención a los Servicios del noveno periodo ordinario de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, que reseña este miércoles el portal oficialista Cubadebate, el ministro de Turismo, Juan Carlos García Granda, informó que para el periodo julio-octubre se proyecta el arribo de 1,105,000 visitantes a la isla.
También aseguró que las instalaciones hoteleras y extra hoteleras se prepararon para brindar un “servicio de calidad” durante este verano y que los indicadores de la satisfacción de los visitantes en el destino Cuba muestran que la mayoría fueron evaluados de manera positiva, en tanto crece la satisfacción del mercado nacional.
García Granda puntualizó que en el país existen 78,862 habitaciones; siendo La Habana, Matanzas y Villa Clara los territorios con mayor cantidad, además de que hay 4,773 cabañas en los Campismos Populares.
No obstante, dijo, el 13,2% de las habitaciones físicas se encuentra fuera de servicio. “En este año se han recuperado 1,049 habitaciones de las 5,167 previstas hasta diciembre”.
Aclaró que el ritmo de crecimiento de turistas en la isla es superior al de las habitaciones desde la década del 90.
Además, reiteró que mantienen el propósito de alcanzar en este 2022 los 2,5 millones de visitantes, aunque el turismo a nivel mundial aún no se ha recuperado, con una caída del 60% en comparación de 2019.
El titular también hizo referencia a las principales insatisfacciones de los turistas, quienes se quejan de “la señalización vial, el cambio de moneda y la renta de autos”.
Otros, dijo, cuestionaron la higiene comunal; la infraestructura de las ciudades, viales, edificios y ciudades, además de la falta de variedad de alimentos y bebidas.
García Granda apuntó ante los diputados que el servicio turístico enfrenta, además, la falta de uniformes para algunos trabajadores, así como algunos problemas en la trasportación del personal.
Según datos oficiales, en el primer semestre del año el gobierno cubano recibió solo 682,411 visitantes extranjeros, incumpliendo su plan para la fecha.
Hasta ese período, Canadá se mantenía como uno de los emisores por excelencia de visitantes extranjeros que llegan a Cuba, seguido de Estados Unidos y Rusia.
Llama la atención que de la región latinoamericana solo México aparezca en el listado de países, por debajo de Inglaterra, Francia e Italia.
Los datos de este primer semestre de 2022 representan un incremento del 596.3 % con respecto a igual período del año anterior.
Sin embargo, para conocer los verdaderos resultados que está teniendo el turismo en Cuba es necesario remontarse a 2019, antes de que comenzara la pandemia del coronavirus y las restricciones internacionales contuvieran el desarrollo del sector en el mundo.
En 2019 Cuba recibió 4,275,558 turistas, y de esos visitantes unos 2,5 millones lo hicieron en los seis primeros meses del año, por tanto las cifras publicadas por el gobierno para lo que ha transcurrido de 2022 representan solo el 26.6 %.
En un hilo en Twitter, con 23 publicaciones, Joffre Campaña Mora detalló una a una sus impresiones del funcionamiento de los servicios en Cuba, las visibles diferencias sociales, las carencias y el abandono que puede verse por todos los rincones del archipiélago.
"El que podría ser un país maravilloso, es un país destrozado por el comunismo y por el cuento de la igualdad. Cuba es un país de enormes diferencias, en el que los extranjeros son privilegiados y en que los taxistas ganan más que los neurocirujanos", dijo Campaña Mora.
Narró como primera impresión desfavorable, su llegada al Aeropuerto José Martí de La Habana. "Está viejo, descuidado. En migración retuvieron mi pasaporte cerca de 20 minutos, hasta que un funcionario me lo devolvió y permitieron mi ingreso", explicó el viajero.
Visitó con su familia varias ciudades del país, y centros turísticos. Pudo hacer una comparativa de precios, calidad del paisaje urbano, medios de transporte y ofertas de distintos lugares de Cuba. Sobre La Habana dijo que es una "ciudad que podría ser espectacular", pero está "totalmente abandonada".
Entre los hitos arquitectónicos que señaló como hermosos están "el Capitolio, el Teatro Nacional y la zona de Miramar, Vedado y por supuesto el famoso Hotel Nacional", ninguno de ellos construido después de 1959.
"En Cuba hay ciudadanos de 1era, de 2da y de 3ra. De primera, la cúpula del gobierno. De segunda, los cubanos que pueden comprar en las tiendas Panamericana que solo permiten pagos con tarjeta de crédito o con tarjetas virtuales cargadas en el exterior. De 3ra los demás", expresó.
En su estancia en Camagüey pudo conocer de cerca los problemas del transporte en Cuba, las diferencias entre el salario de un taxista y la de un profesional de la salud. Le resultó impactante el deterioro de la imagen de la ciudad, llegando a considerar que está detenida en el tiempo, igual que el resto del país.
Sin embargo, fue a esa urbe también a la que dedicó su único comentario hermoso sobre Cuba. "En Camagüey tuvimos un recibimiento formidable, con un puerco, baile, música, etc. La calidez de este grupo, familiares y amigos de mi esposa (y ahora míos), es lo mejor de Cuba", dijo.
A principios de este año, también una turista canadiense que pasó una cuarentena en Varadero, tras dar positivo al COVID-19, aseguró que no volverá nunca más a Cuba y recomendó a otros posibles viajeros de su país que se abstengan de viajar a la isla, al menos mientras dure la crisis sanitaria por la pandemia.
Jillian White, residente en la ciudad de Halifax, en la provincia de Nueva Escocia, y que había visitado Cuba en una docena de ocasiones anteriores, relató al periódico local Global News la amarga experiencia que tuvo en su último viaje, luego de ser diagnosticada con el virus y forzada a permanecer dos días en un hotel de la zona de playa.
“Fue horrible, agradecí que hubiera otras personas allí con las que compartí esta experiencia tan desagradable”, explicó Jillian. "Desde que volví, me siento muy ansiosa y reviviendo, como si fuera la vida real. ¿Ha ocurrido realmente?", agregó al recordar la horrible experiencia que vivió, y aseguró que no regresará al país, a pesar de amar a Cuba.
Similar vivencia a la de White experimentaron otros canadienses, esta vez en el polo turístico de Cayo Coco, donde se hospedaron a finales de diciembre. Laurianne Gagné, de 22 años, enfermó durante su estancia en el Memories Caribe Beach Resort y tras dar positivo un día antes de su regreso a Quebec, fue trasladada al hotel Playa Paraíso, donde aíslan a los turistas contagiados con el virus. Allí la ubicaron junto a otras dos mujeres en la misma habitación.
De acuerdo con Gagné, el ambiente era pesado pues, además de las molestias de la enfermedad y la preocupación, no tenían seguridad ninguna, por lo que recurrieron a poner una silla frente a la puerta del cuarto. En testimonio ofrecido a la prensa canadiense, agregó que no les garantizaron ni las mínimas condiciones higiénicas: el papel sanitario y el jabón tuvieron que pedirlo durante dos días.
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