La fábrica refinadora de aceite comestible de Santiago de Cuba recupera sus niveles productivos, tras problemas técnicos que han agravado la escasez del alimento en toda la isla.
Esta industria, la única del país que refina y envasa el aceite comestible que se comercializa en Cuba mediante la libreta de abastecimiento y en la red liberada, debe garantizar este producto a granel de la canasta normada en las provincias orientales y el que se vende con otras presentaciones en casi todo el país, refiere un reporte del diario oficialista Granma.
Según declaraciones del ingeniero Alfonso Pascual Reyes, director de esta entidad, una rotura en una centrífuga atrasó la producción del aceite envasado en pomos de un litro de capacidad, bolsas flexibles de medio litro y porrones de cinco litros.
Pascual Reyes precisó en el citado medio que en ningún momento ha faltado materia prima, ya que en febrero se recibió un buque con aceite refinado y en estos momentos se recibió otro con similar materia prima.
Al estar refinado, dijo, se agiliza el proceso productivo en la única planta refinadora del país, ya que La Habana y Camagüey solo cuentan con líneas de llenado.
El directivo aseguró que tienen materia prima para cumplir la demanda del aceite de la canasta básica normada con un mes de adelanto, así como el del consumo social y el destinado a organismos priorizados, por lo que se espera sostener los niveles de producción fijados para la comercialización liberada.
Asimismo, el director de producción, el ingeniero Rolando Cadete Tamayo, aseguró que el proceso productivo mantiene “absoluta estabilidad”, tras la solución de la avería en la planta, la limpieza con sosa cáustica, así como la asistencia técnica extranjera en la máquina sopladora de pomos y la línea de envasado.
No obstante, un reportaje de la televisión estatal reveló que la crisis está lejos de resolverse, pues se necesitarán cinco meses para recuperar una estabilidad en la comercialización que permita suplir la demanda, además de negar que la escasez se relacione con la invasión de Rusia a Ucrania.
"Ni hablar de la situación del aceite. Está golpeando bastante a todo el mundo. Uno respira un poquito cuando llega a la bodega, pero de ahí para allá no tenemos dónde comprarlo", expresó una usuaria.
En este periodo de inestabilidad y atraso en la producción, la refinadora solo pudo garantizar la producción que se destina a la canasta básica y al consumo social.
La semana pasada Raciel Montalvo Bravo, director de tecnología y desarrollo de ERASOL, aseguró a la prensa oficialista que la escasez de aceite en el país se debe a una mala distribución.
Montalvo afirmó que se mantiene la producción diaria de aceite en correspondencia con lo planificado, y que lo que se necesita es "una mejor evaluación en cada momento de la distribución del aceite lo cual llevaría a que los desabastecimientos fueran menos e impactarían en menor grado en la población".
"No es fácil alcanzar la convergencia entre oferta y demanda, a no ser que la producción se eleve de manera sistemática", añadió por su parte una trabajadora de la empresa.
Un reportaje de la prensa oficialista instó a las cadenas de tiendas CIMEX, TRD y CARACOL a perfeccionar su programa de distribución de aceite y evitar el desbalance en las entregas y ventas en Santiago de Cuba.
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