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La Seguridad del Estado cubana detuvo este domingo a Damas de Blanco que, junto a madres de presos políticos del 11J salieron a manifestarse por la liberación de los manifestantes encarcelados, entre los cuales se cuentan una decena de menores de edad.
“Represores de la Seguridad del Estado arrestan a Damas de Blanco y a la madre del niño preso político cubano [Barbara Farrat] al salir de la sede nacional de la organización en Lawton-La Habana”, reportó el activista Ángel Moya Acosta en sus redes sociales.
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La publicación fue acompañada con fotos tomadas durante la arbitraria detención de las activistas, que fueron rodeadas por una horda de mujeres represoras de la Seguridad del Estado que ejecutaron con violencia la orden de arresto.
Horas antes del operativo policial, Bárbara Farrat conseguía llegar hasta la sede de las Damas de Blanco y compartía en redes sociales una foto junto a Berta Soler, líder de la plataforma de la sociedad civil, y otras integrantes de la misma organización.
“Bárbara Farrat, madre del niño preso político cubano Jonathan Torres Farrat, junto a las Damas de Blanco en su sede en Lawton para exigir al régimen comunista la libertad de los presos políticos. En esta lucha todos cuentan, la vida de los presos políticos cubanos también importan”, indicó el opositor Moya Acosta, esposo de Soler.
La iniciativa se inscribe dentro del llamado de las Damas de Blanco a manifestarse por la liberación de los presos políticos, que encontró eco entre familiares de presos del 11J de La Habana y Camagüey. La propia organización aseguró que, desde este domingo, retomarán sus históricas caminatas para exigir la liberación de los detenidos.
En la capital los padres de Jonathan Torres Farrat y Walnier Luis Aguilar Rivera, jóvenes cubanos que participaron en las históricas protestas del 11J en Cuba, se sumaron a la reclamación de libertad que juntó a familiares de presos políticos en la iglesia Pasionista de la Víbora.
Mientras el primero, de tan solo 17 años, podría enfrentar penas de hasta 7 años de privación de libertad (como ha sucedido con otros adolescentes ya juzgados), el segundo -vecino del empobrecido barrio de La Güinera- enfrenta una condena de 22 años de cárcel, a pesar de sus acreditados problemas cognitivos.
Desde Camagüey seis madres de los jóvenes que han sido sometidos a juicios sin garantías llegaron hasta la iglesia y en la misa dominical pidieron porque sus hijos sean liberados. Las madres de presos políticos de toda Cuba protagonizan cada noche un cacerolazo que visibilizan en redes sociales para exigir acciones del gobierno cubano.
Este viernes las Damas de Blanco, una organización fundada en 2003 por las madres y esposas de los presos políticos de la llamada Primavera Negra en la isla, anunciaron que volverían a las calles para exigir la liberación de los más de 800 presos políticos cubanos. En su convocatoria llamaron a sumarse a estas marchas pacíficas a las madres de los jóvenes del 11J.
A finales de junio, recomendaron la unión de los familiares de los presos políticos en Cuba para presionar al régimen para su liberación, y ofrecieron su conocimiento y apoyo en estas acciones.
“Las Damas de Blanco es el resultado de la unidad familiar. Cuando el régimen cubano en el año 2003 encarceló a 75 cubanos por razones políticas, nos unimos y los liberamos”, explicó en un mensaje publicado en redes sociales su presidenta Berta Soler, quien –en nombre de todas las activistas- mostró su solidaridad con Zuleidi Cepero, esposa del activista detenido Esteba Rodríguez, quien se encontraba entonces en prisión por la protesta de la calle Obispo.
Este sábado, Moya denunció que la Seguridad del Estado mantenía un operativo contra la sede de las Damas de Blanco en La Habana, organizado pocas horas después de que el grupo de mujeres anunciara su intención de reanudar sus marchas por las calles del país para exigir la liberación de los presos políticos.
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