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La Comisión de Relaciones Internacionales de la Asamblea Nacional del Poder Popular emitió este lunes una declaración en la que critica el próximo debate en el Parlamento Europeo sobre derechos humanos en Cuba, que tendrá lugar el 16 de septiembre.
La Asamblea, que es conocida por su "unanimismo" servil ante el gobierno cubano, calificó el debate de "ejercicio politizado" para responder a una "agenda impuesta desde Estados Unidos".
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"Hemos seguido con atención los hechos más recientes ocurridos en el Parlamento Europeo y constatamos con indignación que el mismo grupo reducido de eurodiputados que responden a la agenda de Washington ha logrado imponer un nuevo debate sobre Cuba el próximo 16 de septiembre", dice el comunicado, publicado en el portal oficialista Cubadebate.
Según la Asamblea, estos políticos han "arrastrado tras sí a los grupos políticos de los que son miembros, lo cual convierte nuevamente a esa entidad legislativa en triste rehén de una escalada agresiva ajena a intereses genuinamente europeos y contraria al espíritu de diálogo respetuoso que ha primado en las relaciones entre Cuba y la Unión Europea".
La declaración añade que "los promotores de esta nueva maniobra no tienen autoridad moral para pretender erigirse en defensores de los derechos del pueblo cubano".
"No pueden serlo quienes no tienen el decoro suficiente para actuar de manera independiente y obedecen los dictados de la potencia que despliega una brutal guerra económica, comercial, financiera, política y comunicacional contra nuestro país —recrudecida en momentos en que enfrentamos la pandemia—, que constituye la más flagrante y sistemática violación de los derechos humanos de todos los cubanos, algo que estas personas, haciendo gala de su proverbial hipocresía política, ni siquiera se han molestado en condenar", se quejó La Habana.
La Asamblea Nacional elogió, en cambio, el trabajo del "Grupo Parlamentario de Amistad con Cuba", encargado de intentar responder a denuncias como la que tendrá lugar el próximo miércoles.
El ente cubano llamó "a todos los miembros del Parlamento Europeo a no respaldar" lo que insistió presentar como una "nueva maniobra".
La semana pasada, la vicepresidenta del Parlamento Europeo, Dita Charanzová, denunció la detención arbitraria del opositor cubano Guillermo Fariñas y aseguró que se prepara una nueva resolución para pedirle al jefe de la Diplomacia europea Josep Borrell, algún tipo de acción.
En junio, el PE aprobó (por 386 votos a favor y 236 en contra, con 59 abstenciones) una dura resolución -impulsada por el grupo conservador del Partido Popular Europeo junto a los liberales y eurodiputados de extrema derecha- en la que señalaron que Cuba “no ha registrado avances concretos” en materia de derechos humanos.
Además condenó violaciones de derechos humanos en Cuba como “la persecución política persistente y permanente, los actos de acoso y las detenciones arbitrarias de disidentes”, y pidió la liberación de los presos políticos en la isla.
En esa ocasión, el llamado "Parlamento cubano", calificó la condena de "espuria e injerencista".
Al mes siguiente, en julio, miles de cubanos se lanzaron a las calles en una inédita protesta masiva que el gobierno no dudó en reprimir y que causó al menos un muerto entre los manifestantes. Según varias organizaciones independientes, los detenidos por las protestas del 11J rondan el millar.
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