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El gobierno cubano ocultó durante más de dos meses la avería ocurrida en la planta productora de oxígeno medicinal Oxicuba, la principal del país, que echó a andar nuevamente el pasado 4 de septiembre, y aún no es capaz de satisfacer la demanda, en medio del peor momento de la pandemia de coronavirus.
Durante 100 días estuvo detenida la línea de producción de oxígeno medicinal, producto esencial para el tratamiento a pacientes de COVID-19, cuya falta ha provocado numerosas muertes de enfermos en hospitales y otros centros de salud.
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Según un reportaje del portal oficialista Cubadebate, "el 26 de mayo OxiCuba S.A. detuvo sus producciones y comenzó a distribuir a partir de inventarios y una pequeña planta que quedó funcionando".
Sin embargo, pese a que la avería en la fábrica ocurrió en esa fecha, ese dato se mantuvo en absoluto secreto y solo se informó el 15 de agosto, cuando el ministro de Salud Pública, José Ángel Portal, informó ante la prensa estatal que debido a la rotura de una pieza en la principal planta productora de la Isla, las producciones de oxígeno estaban "limitadas".
Al otro día, el gobernante Miguel Díaz-Canel se mostró visitando dos plantas de las Fuerzas Armadas que se sumaron a la producción del gas, junto a otra donada por Rusia para ayudar a paliar la crisis nacional con la cobertura de oxígeno.
O sea, la causa de la falta de oxígeno en los hospitales para enfermos de COVID solo se dio a conocer a la población cuando ya se podía mostrar la solución al problema.
Según las informaciones aparecidas en la medios oficialistas en agosto, una vez que se produjo la avería el gobierno creó un puesto de mando para dirigir las asignaciones hacia los hospitales del poco oxígeno con que se contaba, el cual estaba disponible en parte gracias a lo que quedaba almacenado, y a las producciones de otra pequeña planta ubicada en Santiago de Cuba.
Esta semana José Manuel Gámez Álvarez, gerente general de OxiCuba, expresó a Cubadebate que tras la rotura de mayo, "los primeros meses había altos niveles de inventario en el país, por tanto, no se sintió", algo que contradicen las muchas denuncias compartidas en redes sociales, de cubanos cuyos familiares sufrían la falta del preciado medicamento.
El dirigente se limitó a lamentar que en agosto, "con el alza de los casos de COVID-19, el último mes de la avería fue muy duro para este país", antes de anunciar con optimismo que OxiCuba produce diariamente "70,000 metros cúbicos de oxígeno líquido diariamente, por encima de la demanda del sistema de salud que actualmente es de 40,000".
En los últimos días, cuando el país reporta miles de nuevos casos de coronavirus y decenas de muertes, Díaz-Canel ha visitado varias veces la planta Oxicuba, ocasiones en las que ha alabado las obras de reparación y el trabajo de técnicos y obreros.
Pese al optimismo que intenta mostrar el dirigente, la empresa cubana de gases industriales informó que al menos en dos meses no será posible restablecer los niveles de distribución de oxígeno médico necesario en los centros sanitarios del país.
Según Yamilet Fuentes Pardiñas, directora general de la entidad, en los meses recientes el Ministerio de Salud Pública necesitaba cerca de 40,000 metros cúbicos diarios y por el momento es imposible recuperar los inventarios.
"Ahora hay que volver a llegar a esos números", señaló.
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