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La Clínica Veterinaria de Animales Afectivos La Playa, la única de gestión estatal en la ciudad de Matanzas, capital de la provincia homónima, fue cerrada debido al deterioro de la instalación, según una publicación en redes sociales este martes.
El usuario Manuel Osvaldo Torres, de la comunidad protectora matancera, expuso que los dueños de mascotas y trabajadores del centro han reclamado durante mucho tiempo que las autoridades presten atención al declive constructivo de la clínica.
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También destacó que el personal, “a pesar de las carencias y problemas relacionados más bien con la falta de voluntad por parte de los que toman las decisiones, hacen maravillas para que nuestros animalitos reciban la atención que merecen, con precios módicos”.
Torres recordó que “no todo el mundo tiene el poder adquisitivo que se necesita para acceder a los servicios de las clínicas particulares”.
“Es muy triste entonces ver que, en contraste con este excelente desempeño laboral, el centro cuente con un estado crítico al incumplir con requisitos constructivos e higiénico-sanitarios indispensables para prestar servicios. El local posee serios problemas constructivos: techos en peligro de derrumbe, además de carencias básicas como luz eléctrica, agua corriente, medios de limpieza, mobiliario, seguridad y salud del trabajo”, comentó.
Según describió, la provincia cuenta con clínicas veterinarias estatales solo en las ciudades de Matanzas, Cárdenas, Colón y Unión de Reyes. Por otro lado, Jagüey Grande posee un consultorio y territorios como Los Arabos, Martí, Calimete y Ciénaga de Zapata no disponen de un local.
En febrero, el gobierno cubano decidió excluir la atención a los animales afectivos de las prohibiciones sobre el ejercicio privado de la medicina veterinaria dispuestas en el decreto ley 20/2020, luego de los reclamos y presiones de la sociedad civil.
Ese mismo mes, animalistas cubanos denunciaban el cierre de la principal clínica veterinaria estatal de La Habana, ubicada en la céntrica avenida de Carlos III.
“Supuestamente para el año 2018 se había trazado un plan de inversiones para la reparación, a través de mantenimientos constructivos, de las clínicas de Matanzas y Cárdenas, pero se paralizaron debido a la escasez de materiales, cuando vemos a diario como otras obras que ni remotamente tienen el impacto social de las clínicas, no han parado”, apuntó Torres.
Asimismo, señaló que el cierre de la clínica en Matanzas se produjo a pocos días de haber salido a la luz el Decreto-Ley 31/2021 “De Bienestar Animal”, significando “un balde de agua fría al trabajo de los protectores que han visto allí el único lugar estatal al que se puede asistir para atender a las poblaciones callejeras”.
En el caso de las esterilizaciones, subrayó que no es lo mismo pagar 205 pesos cubanos cobrados por la clínica estatal que los 1150 cup que cobran en una privada “por la ligadura de una gatica”.
“Nuestro llamado es para que se tomen medidas urgentes, y si bien no se puede arreglar el centro de la noche a la mañana, pedimos se valore encontrar cuanto antes otro local, aunque sea provisional; pero que continúen los servicios. Es esta además la única Clínica provincial que emite certificados de exportación de animales del país; por lo que si usted quiere viajar con su mascota o va a emigrar y es su deseo llevársela, hoy no puede hacerlo”, advirtió.
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