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La actriz Blanca Rosa Blanco defendió en redes sociales la importancia de la libertad de expresión y la diversidad de criterios en Cuba.
"Nada puede detener el ejercicio del pensamiento diverso. Respetuoso y legítimo", indicó en su perfil de Facebook, refiriéndose a la reunión espontánea de artistas que tuvo lugar frente al Ministerio de Cultura de Cuba, el pasado viernes.
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"Yo fui, pude ver de cerca en cada uno de los que estaban allí un nuevo pensamiento, una nueva generación, vi a otros que no se han cansado, esos también estaban", señaló Blanca, quien indicó en su mensaje publicado en Facebook, que seguirá confiando en el diálogo y en la responsabilidad que tienen los artistas con el pueblo cubano, con la nación y con la Patria.
El viernes en la mañana un grupo de jóvenes creadores cubanos se reunió en la sede del Ministerio de Cultura (MINCULT), en el barrio habanero del Vedado, en protesta cívica por la intolerancia del régimen cubano y en apoyo al Movimiento San Isidro para exigir la revisión del proceso judicial del rapero Denis Solís y que se le permita el retorno a su domicilio al artista independiente Luis Manuel Otero Alcántara.
Las decenas de personas que espontáneamente fueron llegando al lugar se congregaron para exigir respuestas ante la represión a la libertad de pensamiento y el allanamiento a la sede del Movimiento San Isidro en La Habana Vieja, la noche del jueves pasado.
El MINCULT accedió a recibir a un exiguo grupo de los manifestantes, tras lo cual se anunciaron acuerdos para iniciar los debates y se fijaron fechas para los mismos. Sin embargo, al día siguiente en la Televisión Cubana algunos de ellos fueron desestimados.
Por su parte los miembros del Movimiento San Isidro insisten en la importancia de no enfocar la dinámica sociopolítica que vive Cuba solo desde los discursos del arte independiente, pues se trata de una realidad mucho más compleja que atañe a la sociedad civil cubana en su conjunto.
El Gobierno cubano, en cambio, insiste en acusar a Estados Unidos de injerencia en los asuntos internos del país y vincula a los huelguistas del Movimiento San Isidro con una supuesta actividad subversiva de la administración estadounidense en Cuba.
El Movimiento San Isidro ha sido incluso asociado por Carlos Fernández de Cossío, director general para EE.UU. (Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba) con supuestas incitaciones a realizar acciones terroristas, como parte de la estrategia del régimen para posicionar al pueblo contra el avance del movimiento social.
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