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La Audiencia Nacional de España ratificó la decisión del Ministerio de Justicia de denegar la nacionalidad española a un matrimonio de cubanos por realizar trabajos de espionaje para el régimen de La Habana.
A pesar de que ambos residían legalmente en ese país europeo desde 2012, los tribunales denegaron su solicitud que se había iniciado en 2014. En cambio, decidieron aprobar la tramitación a la hija de la pareja, de 15 años de edad.
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En el curso de la tramitación del expediente, el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) presentó un informe sobre las actividades de los cubanos y alegó “razones de seguridad nacional” cuando se opuso a que se les concediera la nacionalidad española, según informa el diario El País.
El informe del servicio secreto español expuso que la ciudadana cubana, de 38 años, “realiza distintas actuaciones en favor de los oficiales de inteligencia de alto nivel asentados en España”, al igual que su esposo.
“Hay constancia de su asistencia a reuniones de diferente índole del interés de la inteligencia cubana sobre las que mantiene posteriores reuniones con los OI [Oficiales de Inteligencia cubanos]. Posteriormente, niega en círculos próximos el haber mantenido estos contactos y actividades. Estas actuaciones en favor de los servicios cubanos cabe situarlas desde 2010 hasta la actualidad”, precisa al documento.
Aunque a la mujer no le constan antecedentes penales, el tribunal consideró que no cumplía el requisito de buena conducta cívica, a pesar de que la Fiscalía y el Registro Civil emitieran un informe favorable sobre ella.
En relación con la sentencia referida al esposo, de 51 años, la Audiencia Nacional estimó que el informe del CNI “expone los motivos que provocan su recomendación de denegar la nacionalidad y que consideramos no es necesario recoger aquí, precisamente por los motivos de seguridad que se invocan, siendo que constan tanto en el expediente administrativo como en esta vía jurisdiccional”.
Según El País, el CNI intenta neutralizar los servicios secretos cubanos, que “figuran entre los más potentes de América Latina y cuentan con una extensa red de colaboradores en España”.
El medio también recuerda que en 2016 la Audiencia Nacional le había negado la nacionalidad a un cubano con más de 15 años de residencia en ese país, donde dirigía un entramado empresarial con agencias de viajes y asesorías jurídicas.
Para ese caso, un informe del CNI reveló: “Ha recibido formación en Contrainteligencia en la escuela de la Dirección General de Contrainteligencia (DGCI) Cubana Hermanos Tamayo, en la que coincidió con el hijo del actual ministro del Interior cubano. Aunque en estos momentos no es personal activo del Ministerio del Interior cubano, colabora con este a favor de intereses cubanos”.
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