El próximo martes, a las 8:30 de la noche el Gran Teatro de La Habana “Alicia Alonso” volverá a vestirse de largo, esta vez para homenajear por sus 80 años de vida artística a la vedette de Cuba, esa leyenda convertida en mujer que es Rosita Fornés.
A pesar de que mi carrera profesional fue dirigida por completo al deporte, siempre, desde que la conocí personalmente hace más de 30 años, persigo sus presentaciones, le he hecho cuantos reportajes y entrevistas he podido e, incluso, profundizando en su vida, escribí en una ocasión que, “afortunadamente Cuba perdió una nadadora (deporte que practicó) y ganó una gran artista”.
Porque eso es Rosita, una gran artista, en toda la extensión de la palabra.
Dirigido por el prestigioso Raúl de la Rosa, el espectáculo recogerá los principales éxitos de la diva, en todas las manifestaciones artísticas de las que hizo gala.
A propósito del homenaje me di a la tarea de recoger algunas impresiones de personalidades del mundo del arte, y aquí las vuelco.
Maylú Hernández - cantante, bailarina y actriz de teatro musical:
“El término ‘vedette’ le queda pequeño, porque su carrera ha sido tan extensa e intensa que ha quedado más que demostrada su inmensa estatura artística.
“Además de sus dotes como cantante, bailarina, actriz dramática y comediante, su desenvolvimiento escénico y su belleza increíble; Rosita hizo suyo cada tema que interpretó, porque le dio el toque personal y la magia de llevar a su público, la emoción y la carga dramática de lo que ella estaba interpretando.
“Cada vez que tengo que hacer un tema que ella ha cantado (¡y ha cantado tanto!), busco su interpretación y la estudio como un clásico.
“Considero, además, que la grandeza de Rosita trasciende lo artístico y la coloca en el Olimpo de los grandes seres humanos de nuestro país pues es un ejemplo de humildad, de sencillez, de simpatía, de gracia criolla, de comprensión, de valentía, de apoyo a los talentos jóvenes, a las minorías y mucho más… Cuba la adora y ¡es más que merecido!
"¡Rosita es inmensa, inalcanzable, invicta, única!”
Raquel Hernández - cancionera:
“Rosita Fornés es la más grande y completa de las artistas cubanas, se ha paseado exitosamente por todos los escenarios, sin alardes, dejando que la historia se haga cargo de hacerle justicia.
“Su nombre está inscrito para siempre en nuestra cultura y no habrá premio que iguale al cariño de su pueblo, al que ha dedicado su talento y su vida”.
Norma Reina - actriz:
“De ella hay mucho que decir: eres y serás la inspiración de todas las actrices cubanas.
“Ser vedette es la cumbre, no es lo mismo que actriz, y no todas podemos llegar ahí. ¡Tú eres y serás por siempre esa gran vedette que cada cubano admira y lleva en su corazón!”
Niurka Reyes - cantante:
“Grande entre las grandes de la cultura cubana, para mí, su versatilidad, que abarcó varios géneros del arte, nos deja a una maestra y ejemplo de generaciones.
“Tiene algo que la diferencia del resto de las artistas y cantantes cubanas: ella vive tanto la actuación que habla actuando, canta actuando. Por sobre todo me impresiona su nivel interpretativo: tanto en el lírico como en lo popular, su histrionismo ha sido predominante.
“Cuando la escuchas cantar te das cuenta de que no se parece a nadie: es, sencillamente, ella. Tiene una manera muy personal de emitir los sonidos, decir las frases, de cantar, actúa sus canciones. Carisma muy personal, ejemplo, la gran vedette de Cuba”.
Katia Caso - actriz:
“Nuestra querida Rosita Fornés, indudablemente, es una de las artistas más grandes que ha dado este país; no solo como cantante y bailarina sino como actriz.
“Uno de sus personajes más relevantes es el filme Se Permuta, donde interpreta de manera genial a una cubana hogareña campechana y madre sobreprotectora; es indiscutible que su nivel interpretativo es alto, un ejemplo de caracterización de un personaje tanto en televisión, cine y teatro, tanto en género dramático como en la comedia”.
Lizt Alfonso - directora de la prestigiosa compañía del mismo nombre:
“Rosa de Cuba, ¡qué clase de artista! La conozco desde pequeña porque trabajaba con Antonio Palacios, el director español de zarzuela, radicado en Cuba, que era amigo de mi familia y se querían mucho.
“Luego por la TV, el teatro, el cine. Ella es un ejemplo a seguir en todos los sentidos. Mujer valiente y artista consagrada. Junto a otras grandes como María de los Ángeles Santana y Consuelo Vidal, hizo época y traspasó las fronteras de ellas para convertirse, de alguna forma en sello de la nación. Felices los que hoy podemos decir que conocemos a Rosa Fornés, la Rosa de Cuba”.
Y claro que yo no puedo dejar de emitir mi criterio, el cual voy a trasmitirle mediante una anécdota: cuando mis hijos eran pequeños, estaban en el círculo infantil, existía la emulación entre esos centros y yo, que conocía a Chiquitina (Rosa María Medel, la hija de la Fornés) le pregunté si su mamá querría ir conmigo a la fiesta de fin de curso que determinaba el ganador de la emulación.
Así, fui a buscar a Rosita, y al conocerla mi mamá, muerta hacía mucho tiempo, revivió, y la mujer que llevaba a mi lado en el carro era Ángela Julia y no Rosita Fornés.
Fue tan dulce, tan cariñosa, tan humilde. Los niños le regalan un ramo de flores al llegar al círculo y ella extrajo la rosa más grande, más hermosa, más roja, y me dijo: “pónsela en mi nombre a tu mamá y dile que yo también la quiero mucho a ella.”
Por esto, por todo, por no hablar mal jamás de ningún compañero, por su carisma, por su condición humana, por su excelencia, es Rosita Fornés la gran vedette de este país.
Dichosos los que este martes podremos acompañarla en su merecido homenaje.
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