La cantante y actriz Rosita Fornés, la vedette más famosa de Cuba, cumple este lunes 11 de febrero 96 años de edad, siendo una de las grandes figuras de la historia de la cultura de la nación caribeña.
Nacida el 11 de febrero de 1923 en la ciudad de Nueva York, viajó con su madre a los dos años a Cuba donde desde muy temprano comenzó a dar señales de su aptitud para el arte.
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Hija de padres españoles inició su camino al estrellato tras su participación en el célebre programa La Corte Suprema del Arte, de la emisora CMQ-Radio.
Luego empezó a trabajar en diferentes espacios bajo la dirección de German Pinelli y a los 18 años dio el salto definitivo hacia la fama con su rol en la opera El asombro de Damasco, que recibió un sinfín de elogios por la crítica de la época y el público.
La veddete colaboró con las principales figuras de la música cubana como el pianista y compositor Ernesto Lecuona, quien tuvo un papel decisivo en la carrera de la cantante.
La artista se presentó en los principales teatros de Cuba y actuó en los más celebres auditorios a nivel mundial. Se presentó en innumerables países como Estados Unidos, México, España, Hungría, Bulgaria y Rumania, entre muchos más.
Su trabajo en el cine alcanzó una enorme popularidad. Los cubanos la recuerdan en su roles protagónicos en filmes como Papeles secundarios y Se permuta, donde interpretó el papel de Gloria bajo la dirección de Juan Carlos Tabío.
En el cine mexicano se convirtió también en una figura muy querida tras su participación en más de una decena de filmes donde actuó junto a como Joaquín Pardavé, los hermanos Soler, Luis Aguilar, Jorge Negrete, Pedro Infante, Tin Tan, Marga López, entre otros. En México tambien fue reconocida como la "Vedette de América".
A pesar de su fama internacional nunca dejó de trabajar en Cuba, donde triunfó en la opereta, la zarzuela, así como en revistas y espectáculos musicales como La Fornés Tridimensional y La Fornés en el Musical, dirigida por Héctor Quintero.
Al cumplir el pasado año 95 años de edad, la artista declaró a la prensa cubana que su mayor premio es “ la manera en que me ha recibido el público, cómo me ha querido siempre”.
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