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El anuncio del Gobierno de Cuba de que "estudia la creación de una criptomoneda" para impulsar la economía, actualmente sumida en una crisis, ha sido recogido por el creador de un antivirus que lleva su apellido, John McAfee, quien no ha dudo desde su cuenta de Twitter en brindar su ayuda.
La decisión de la isla, afirma este excéntrico millonario, "finalmente supondría una aplicación a gran escala en el mundo real para las monedas criptográficas (o criptomonedas)".
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"Cuba planea usar la criptomoneda para superar los 63 años de estrangulamiento económico impuesto a 14 millones de cubanos por la locura del Gobierno de los Estados Unidos", agregó McAfee, quien simpatiza abiertamente con el régimen y hace poco presentó su propia campaña para las elecciones de EE UU en 2020 desde La Habana.
A la propuesta del magnate estadounidense respondió "un desarrollador de criptomonedas de origen cubano", según su tweet, que busca "impulsar la adopción masiva de 'crypto' en Cuba" a través de un proyecto llamado Sentivate.
McAfee señaló que estarían en contacto.
Desde hace un tiempo este estadounidense está en la isla, desde donde sube imágenes y videos con tabaco en mano y bailando en lugares como El Gato Tuerto o Tropicana.
Aunque esta iniciativa de colaboración con el Gobierno de Cuba fue bien recibida por la mayoría de sus seguidores, algunos como Carlos Santos señalaron que "estás ayudando a un Gobierno criminal. Pregunte a los cubanos si son libres de abandonar su país cuando quieran. ¿O si pueden ser emprendedores libremente? Echa un vistazo a los privilegios que tiene la gente alrededor del Gobierno, en contra de la gente común".
La criptomoneda de MacAfee todavía está en proceso de estudio y fue anunciada por él mismo para el otoño de este año.
Si Cuba crea una criptomoneda, como anunció el ministro de Economía y Planificación Alejandro Gil, se uniría a otros países aliados que la utilizan como Venezuela, Rusia e Irán, apunta la agencia Reuters.
Esta medida y otras tomadas recientemente por el sucesor de Raúl Castro han sido dadas con cuenta gota por las autoridades de La Habana.
El gobernante Miguel Díaz-Canel anunció hace una semana el incremento salarial, efectivo a partir de agosto, y de momento no queda claro cuánto será para todos los trabajadores que dependen el Estado.
Cuba insiste en que no son medidas populistas, aunque se producen justo en un momento de gran escasez de productos alimenticios e incluso medicamentos, la subida de los precios hasta del transporte por los problemas con el combustible y cuando desde Washington han recrudecido el embargo a la isla con la activación del Título III de la Ley Helms.Burton, que permite las denuncias contra quienes se enriquecen con propiedades expropiadas por el fallecido dictador Fidel Castro.
A esto se suma, la crisis política y económica de Venezuela, el principal socio comercial de Cuba.
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