El presidente del Consejo de Defensa Provincial en La Habana, Luis Antonio Torres Iríbar, comentó en una reciente entrevista para la televisión cubana, que las afectaciones producidas por el tornado han sido “severas”.
Torres Iríbar, quien regresaba de un recorrido por algunas de las localidades habaneras impactadas por el fenómeno meteorológico, afirmó que aunque se “esperaba intensas lluvias” y “penetraciones del mar” en la tarde del domingo, el tornado fue “algo que no se pudo prever”.
Un fenómeno de este tipo no había azotada a La Habana desde el 26 de diciembre de 1940, cuando un gran tornado cruzó el sur de la ciudad y dejó casi 40 fallecidos y más de 400 heridos.
Según el representante del gobierno de la capital cubana, el desastre natural “ha tocado profundamente” a instituciones públicas y viviendas, "especialmente al municipio de Regla”.
Diez de Octubre y San Miguel del Padrón, fueron otros de los territorios habaneros que recibieron el impacto de los fuertes vientos y lluvias.
El fenómeno tumbó árboles, semáforos, postes de telefonía y electricidad, causó el vuelco de automóviles y ómnibus y arrancó los techos de decenas de edificaciones.
La Habana amaneció este lunes mostrando un triste escenario de destrucción tras el azote del poderoso tornado, que ha dejado al menos tres muertos y 172 heridos.
Entre los lesionado están las 25 personas que se encontraban en el momento del desastre dentro de un ómnibus. Estos fueron socorridos y llevados al policlínico de Regla. Mientras tanto, en el municipio Diez de Octubre fue necesario trasladar a los pacientes del hospital materno Hijos de Galicia, en su mayoría mujeres embarazadas y niños.
Igualmente, Luis Antonio Torres, declaró a la televisión estatal que la cifra de tres fallecidos es aún preliminar, pues debido a los derrumbes en viviendas no es descartable que haya más víctimas.
“Yo quiero decirles que hay viviendas que han perdido sus placas. Se derribaron los segundos pisos de viviendas compelta. Edificaciones que perdieron (...) parte del techo”, añadió.
En la localidad de Chibás, en el municipio de Guanabacoa, el techo de un albergue de tránsito -donde se alojaban un aproximado de 200 personas- fue "completamente destruido", informó Torres Iríbar.
La tarde-noche de este domingo varias zonas de la capital cubana sintieron el impacto del poderoso tornado, cuyos vientos alcanzaron rachas de 100 km/h. El fenómeno fue provocado por "una baja extratropical que descendió del sudeste del golfo de México a la región occidental del país".
Durante la noche también se registraron inundaciones en varios sectores del Malecón de La Habana y otras zonas bajas del litoral tanto en la capital como en las provincias occidentales de Pinar del Río, Mayabeque y Artemisa, según un parte preliminar de las autoridades cubanas.
La Comisión de Seguridad Vial de La Habana informó del cierre de numerosas calles y avenidas de la capital y pidió "mantener la disciplina" para evitar accidentes.
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