Habaneros avistaron este sábado una tromba de altura (rabo de nube) al sur de la capital cubana, que afortunadamente no llegó a desarrollarse por completo.
Según informó el Centro Nacional de Pronósticos del Instituto de Meteorología, el fenómeno se observó en la tarde en el municipio habanero de Boyeros, donde se registró también una tormenta local severa, con caída de granizos y vientos fuertes en racha, debido a la inestabilidad vespertina propia de esta época del año.
“Tromba al sur de La Habana. No tocó tierra ni se reportan daños”, indicó en Facebook el periodista oficialista Oscar Figueredo sin ofrecer mayores precisiones.
El programa televisivo "Hola, Habana" compartió, a su vez, un post en el que precisó que la tromba "al parecer no tocó tierra, ni provocó daños, por lo que NO se considera un tornado". Además, indicó que su ubicación preliminar fue en las inmediaciones del Parque Lenin.
“Era lo último que nos faltaba, por suerte no tocó tierra”, comentó una usuaria de Facebook.
La preocupación manifestada no es en balde, pues el 27 de enero de 2019 varios municipios de La Habana sufrieron el paso devastador y traumático de un fuerte tornado que provocó muertes y cuantiosas afectaciones a viviendas.
Casi un año después de ese suceso, una tromba marina fue avistada a pocos metros de la entrada al túnel de la Bahía de La Habana. En ese entonces, los internautas también expresaron su preocupación por tales fenómenos.
En abril pasado, un tornado dejó afectaciones en algunas viviendas del reparto Modelo-Imán, en el municipio cabecera de Camagüey.
Sin embargo, la experiencia en La Habana ha sido de las más impactantes. Algunos de los cubanos que perdieron su vivienda entonces, permanecen todavía sin techo, como el caso de Carlos Luis Pozo Vaillant, quien residía en calle Colina no.13, entre Delicia y Diez de Octubre, municipio de Diez de Octubre, antes de que el tornado destruyera su casa.
El gobierno cubano cifró los daños en cuatro muertos y 195 heridos, además de 1,238 afectaciones en viviendas, de ellas 347 derrumbes totales de casas y techos. Los meteorólogos explicaron que el tornado fue consecuencia de condiciones ambientales favorecidas por una vaguada.
Asimismo, estimaron que el torbellino tuvo su origen en las inmediaciones del Reparto Martí y el Casino Deportivo, aproximadamente a las 8 y 20 de la noche. Luego se fue trasladando en dirección este-nordeste, y 26 minutos más tarde salió por un punto de la costa norte, específicamente en el barrio de Celimar.
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