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La tormenta tropical Rafael se acerca al Occidente de Cuba, adonde amenaza con llegar en las próximas horas con categoría de huracán, y sin embargo la población sigue sufriendo masivos y largos apagones que dificultan su preparación para situaciones de emergencia.
Ante esta situación, son muchos los cubanos que claman porque se restablezca el servicio eléctrico y denuncian la falta de previsión de las autoridades, recordando que los apagones dejaron prácticamente incomunicado el Oriente de Cuba durante el paso del huracán Oscar, una negligencia que costó vidas humanas en San Antonio del Sur y dejó un panorama desolador con miles de damnificados en Guantánamo.
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“Ya van más de catorce horas en que deberíamos estar informados, recogiendo agua y recargando móviles para no quedar aislados y desinformados. ¿No tuvieron suficiente con lo ocurrido en Guantánamo?”, protestó la académica y activista matancera Alina Bárbara López Hernández, quien denunció en sus redes sociales que “casi toda la ciudad de Matanzas permanece sin electricidad desde ayer a las 6 de la tarde” en medio de la fase de alerta ciclónica.
En el grupo de Facebook ‘Empresa Eléctrica Matanzas” son muchos los usuarios que también denuncian esta situación de desamparo en un momento de alerta por huracán, en la que la falta de fluido eléctrico impide el abastecimiento de agua y las comunicaciones.
“Más de 20 horas sin electricidad. Señores, en este circuito están los edificios que sin electricidad no tenemos agua. Los tanques están vacíos y se acerca un huracán: se pueden mover los tanques con el viento”, alertó el usuario identificado como Ernesto Morales.
“Alguien con conocimiento, por no decir otra cosa: 16 horas sin corriente. Los teléfonos de atención a la población en el gobierno no responden. El 18888 dice que está en ‘apagón’. Por favor, estamos esperando un ciclón. Tomen conciencia y pongan la corriente”, dijo Estrella.
“¿Hasta cuándo vamos a sufrir su mal trabajo? Y, para colmo, con huracán a las puertas. Ahora sí tienen el pretexto perfecto para tenernos más horas sin corriente, así que a prepararse”, lamentó Idania Ramírez Rodríguez, quien se quejó de haber tenido apenas una hora de electricidad entre las 21:00 horas del lunes y las 07:00 de este martes.
“Y no ha llegado el ciclón Rafael… Prepárense para no ver la luz en unos cuantos días”, advirtió otro usuario en el citado grupo de Facebook.
Mientras tanto, Rafael avanza hacia el noroeste con rumbo a Cuba, manteniendo una velocidad de 20 km/h y vientos máximos sostenidos de 95 km/h. Se espera que el sistema experimente una intensificación progresiva durante las próximas horas, pues hay condiciones favorables para su desarrollo este martes.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) advierte que Rafael podría convertirse en huracán mientras se aproxima a Cuba y alcanzar las costas del archipiélago con fuerza el miércoles. En ese sentido, emitió un Aviso de Huracán para las provincias cubanas de Pinar del Río, Artemisa, La Habana, Mayabeque, Matanzas y la Isla de la Juventud.
Para las provincias cubanas de Villa Clara, Cienfuegos, Sancti Spíritus y Ciego de Ávila, se emitió Aviso de Tormenta Tropical, mientras que las provincias cubanas de Camagüey y Las Tunas recibieron Aviso de Vigilancia de Tormenta Tropical.
El aviso de huracán significa que se esperan condiciones adversas en las áreas mencionadas, en un período aproximado de 36 horas. Se recomienda a la población que tome precauciones inmediatas para proteger vidas y bienes materiales.
Los cubanos deben mantenerse informados sobre la evolución de la tormenta tropical Rafael, porque todo indica que ganará más fuerza en las próximas horas.
Las autoridades locales y el Instituto de Meteorología de Cuba recomiendan monitorear de cerca la situación, debido al riesgo de condiciones climáticas adversas que podrían representar un peligro para las vidas y los bienes.
Pero, al igual que sucedió con Oscar, los apagones están impidiendo a la población que se prepare adecuadamente para hacer frente al fenómeno meteorológico.
Apagones y desastre al paso de huracán Oscar por Guantánamo
Los testimonios ofrecidos por los propios pobladores y vecinos de los lugares más afectados por el huracán Oscar -como San Antonio del Sur, Imías y San Ignacio- muestran el error cometido al dejar a la población sin electricidad e incomunicados.
Las comunidades afectadas estuvieron días sin electricidad y sin saber nada sobre la situación, lo que generó incertidumbre. No hubo esfuerzos rápidos para restablecer la comunicación, lo cual dejó a muchas personas en condiciones muy precarias.
El colapso total del sistema eléctrico nacional (SEN) del 18 provocó una desconexión que afectó la capacidad de comunicación y respuesta, dificultando la coordinación de las acciones de emergencia y la ayuda a las comunidades.
Además, señalaron que la falta de electricidad y la ausencia de radiocomunicadores fue un gran problema que incidió a la hora de activar los "consejos de defensa"
Los radiocomunicadores habrían permitido la comunicación sin depender de la electricidad o internet, facilitando la coordinación entre diferentes puntos como la presa, la montaña y el pueblo. Debido al "mal manejo de la dirección", no se contaba con los equipos necesarios, lo cual impidió avisar a la población sobre la gravedad de la situación, salvar vidas y coordinar una respuesta adecuada.
Como resultado de esta falta de comunicación, muchas personas "no supieron lo que pasaba", generando una respuesta desorganizada y caótica, en la que quienes pudieron intentaron desplazarse a lugares más altos sin tener un conocimiento real del riesgo. Hubo personas que murieron ahogadas dentro de sus casas.
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