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La Dirección General de Transporte impuso más de 5,000 multas a choferes en La Habana entre junio y julio, desde la entrada en vigor de las nuevas tarifas para la movilidad de pasajeros por el sector privado.
Las 5,100 multas se fijaron a conductores que violaron los precios establecidos por el régimen y "por ejercer la actividad de transportación de pasajeros de forma ilegal", según informó el diario local oficialista Tribuna de La Habana.
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La Dirección General de Transporte afirmó que "se enfrentaron casos que mostraron reincidencia en la violación, y se aplicaron medidas de mayor rigor con los responsables, que en su gran mayoría no eran los titulares de los medios".
En junio, al anunciar las nuevas tarifas de transportación de pasajeros operadas por privados, las autoridades informaron también que reforzarían las acciones de enfrentamiento y control en la vía para que los precios fijados se cumplan, avisando que aplicarían el Decreto 45 del 2021.
Las autoridades dividieron las 46 rutas de transportación existentes en cuatro grupos, según el precio: de 45 pesos, de 75, de 100 y de 170 pesos.
Los boteros en La Habana no recibieron con agrado la noticia y decidieron dejar de trabajar, como forma de protesta contra la imposición del gobierno.
Varios choferes expresaron su intención de solo transportar a personas en viajes previamente concertados con el cliente y posteriormente, se declararon en huelga, en medio de una disminución drástica del transporte estatal en el país.
La prensa oficialista cubana reconoció que decenas de boteros han dejado de trabajar en La Habana luego de que el Gobierno fijara nuevos precios a sus tarifas.
En La Habana se transportan diariamente un estimado de 600,000 pasajeros, de ellos 536,052 son transportados por los operadores estatales, lo que representa un 89.3%, mientras que 63,948 se trasladan por otras formas de gestión, para el 10.7%.
Los transportistas privados afirmaron que los nuevos precios son insostenibles para ellos, que tienen las mismas dificultades de otros cubanos para satisfacer sus necesidades básicas, y deben comprar a altos precios el combustible y las piezas de repuesto que el estado no vende.
La imposición de los nuevos precios también se aplicó en otras provincias, como Matanzas y Cienfuegos.
El gobierno local del municipio de Limonar, en Matanzas, fijó los precios del transporte privado de pasajeros mediante camionetas, autos, motos, coches y bicitaxi.
Mediante el acuerdo 290 del Consejo de la Administración del Poder Popular en Limonar se establecieron valores que van desde los 200 pesos cubanos hasta 10 CUP, según la ruta y el medio de transporte que se emplee.
El gobierno de Cienfuegos topó también los precios, medida que para algunos expertos agudizará la crisis inflacionaria que hay en el país.
Tras la publicación de la Resolución 81/2023 los diferentes medios de transporte debieron cobrar lo que se estableció a partir de la nueva ficha de costo.
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