Al nuevo presidente de Cuba se le ha visto últimamente volcado en los problemas de La Habana. La ciudad está próxima a celebrar su 500 aniversario y al dirigente parece interesarle que le recuerden por su trabajo para esta fecha en la capital.
Esta semana se reunió con el Consejo de Ministros y las autoridades del Gobierno local para conversar sobre los problemas que aquejan a la capital y los proyectos para solucionarlos. En ese encuentro, Díaz-Canel prestó especial atención por la basura. La Habana está desbordada, la empresa de Comunales trabaja con la mitad de los contenedores que requiere y los tanques de basura no alcanzan. Para colmo, según la prensa oficialista, se han reportado actos vandálicos que han sido “debidamente procesados por la Ley”.
El mandatario tiene esperanzas en los habaneros y quiere solucionar el tema aunque sea con pocos recursos. Según dijo, si se crea un compromiso en la gente y la recogida se hace con constancia, se puede alcanzar la meta.
Durante su más reciente recorrido por la capital el gobernate retomó el tema en la dirección provicial de Higiene, perteneciente a Comunales, donde le explicaron las dificultades para la recogida de basura. El ministro de Economía y Planificación, Ricardo Cabrisa, dijo que se le estaba dando prioridad a ese sector.
Díaz Canel enfatizó en la recogida estable de basura y en organizar el tema de los escombros que se generan en las zonas en construcción.
"Uno de los problemas más complicado de la ciudad es este. Y uno de los problemas que diferencian a La Habana del resto de las provincias (...) Cuando se resuelva -en parte o totalmente- va a marcar un hito en solución de problemas de la población".
En el recorrido el presidente visitó el preuniversitario Mártires del Porvenir, en el municipio Diez de Octubre, preocupado por la educación de los jóvenes y la recreación. Asimismo fue a un hogar de ancianos y a un polícinico.
Durante el recorrido se le vio también interesado en los alimentos. Dijo que había que recuperar esta industria, así que los dirigentes de las empresas que visitó le rindieron cuenta. Uno de ellos explicó que la distribución de yogourt de soya mejoraría a partir de este mes. "El helado, solo un poquito".
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