Desde hace ya un año Cuba padece una intensa sequía que afecta a gran parte del país y se recrudece en algunas zonas, entre ellas la provincia de Sancti Spíritus.
La sequía ha provocado que la presa de Zaza, la más grande del país, se encuentre prácticamente agotada, una situación inusual, que es particularmente grave en una provincia donde la agricultura es uno de los pilares básicos de la economía.
Así, el pasado 15 de mayo la presa de Zaza se situó al 11% de su capacidad, el registro más bajo en los últimos 30 años.
Según reporte reciente de la televisión cubana, los embalses cubanos se encuentran al 36,5 % de su capacidad de llenado y en las provincias centrales Sancti Spíritus y Ciego de Ávila y Camagüey la situación es especialmente grave y los registros se sitúan por debajo del 25%.
Para luchar contra la sequía el gobierno cubano ha puesto en marcha medidas de ahorro y uso racional del agua. Además, se están instalando plantas desalinizadoras y se excavan nuevos pozos de agua.
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