Se estima que unos 5,000 pasajeros serán transportados diariamente por los 20 nuevos triciclos eléctricos que comenzaron a operar en Santiago de Cuba, según informó la prensa oficialista.
El canal local Tele Turquino publicó en YouTube un reportaje en el que destacó la iniciativa, afirmando que está “encaminada a mejorar la transportación” en Santiago de Cuba, e informó que el costo del servicio será de 10 pesos.
“Beneficiará el reordenamiento de otras rutas, así como demás servicios de transportación”, también destacó el canal vocero del oficialismo.
Un directivo de la rama del transporte señaló que una primera etapa comprende la incorporación de 20 de estos triciclos eléctricos, los cuales explicó tienen una autonomía de más de 200 kilómetros.
No obstante, la principal característica del territorio santiaguero es la presencia de empinadas lomas, lo que limita el uso de este medio de transporte a las pocas áreas más llanas, como la zona de la Alameda. Por esta razón, su uso no será extensivo ni beneficiará a toda la población.
Recientemente, Beatriz Johnson Urrutia, primera secretaria del PCC en Santiago de Cuba, defendió el servicio de triciclos en Facebook, presentándolo como una alternativa viable ante la crisis de transporte: “Este servicio cuenta con gran aceptación popular en varias provincias. Aquí ya estamos trabajando en la definición de las rutas”.
Este domingo, también empezaron a brindar servicio 20 triciclos eléctricos en Guantánamo, los cuales tienen la particularidad de que los clientes podrán abonar el pago de forma digital.
Se trata de la primera vez en el país que los usuarios pueden pagar un servicio de transporte público mediante una transferencia electrónica.
Según explicó en Facebook Eduardo Rodríguez Dávila, ministro del sector, en cada vehículo se habilitaron códigos QR para el pago electrónico, aunque se mantendrá la opción del pago en efectivo para quienes lo deseen.
Los triciclos que circulan por varias provincias son propiedad de la Empresa Taxis-Cuba y se ensamblan en territorio nacional a partir de componentes importados de China.
Aunque el régimen promueve esta iniciativa como paliativo ante la crisis actual del transporte, lo cierto es que el país atraviesa uno de los peores momentos de los últimos años en materia de transporte público, con apenas la mitad de medios que circulaban un quinquenio atrás.
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