El Padre Lester Rafael Zayas Díaz pronunció el 24 de diciembre, víspera de Navidad, una homilía en la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, donde confesó su duda sobre qué debía decir a un pueblo que vive en la oscuridad y la desesperanza.
"Les confieso algo, tal vez esta homilía sea la que más trabajo me cueste pronunciar desde que inicié mi ministerio sacerdotal. ¿Qué se puede decir a un pueblo desesperanzado, a la luz del Evangelio de Jesucristo?", se preguntó el párroco.
Lo más leído hoy:
Zayas enfatizó que él no es "un cura político" y dejó claro que tales pretensiones están lejos de sus intereses, pero no podía evitar tocar temas duros de la realidad cubana en su misa, porque es en lo real donde se encuentra a Dios.
"Lo real nos duele, la realidad nos pesa, lo que tenemos delante nos cuesta. (...) Dios vino a un mundo en crisis y sigue viniendo a un mundo en crisis. Las crisis nos hacen fuertes, hacen que pongamos el valor de lo fundamental en lo auténticamente valedero", dijo.
Apeló a la importancia de mantener viva la esperanza, apostar por la verdad aunque duela, sostener un espíritu solidario, rechazar el enfrentamiento de cubanos contra cubanos y amar siempre al prójimo, aunque se esté lejos de esta tierra.
"Hay esperanza para Cuba. Hay tanto bien reservado, tanto amor aguardando para cada uno de nosotros que no hay que temer, porque Dios continuará viniendo a esta tierra. (...) En medio de una realidad que parece desmoronarse, la única cosa que sentimos con fuerza es la verdad de Dios", dijo Zayas.
El párroco es conocido en su comunidad y en las redes sociales de muchos cubanos. Este sacerdote católico cubano ha denunciado en varias ocasiones actos vandálicos contra su iglesia.
En septiembre se hizo viral su misa dedicada a la Patrona de Cuba, la Virgen de la Caridad del Cobre, porque durante la ceremonia describió la lamentable situación que se vive en la isla en medio del éxodo de cubanos.
El Padre Lester Rafael Zayas Díaz realizó esta homilía de Nochebuena en su parroquia Sagrado Corazón de Jesús ubicada en calle Línea, en el barrio de El Vedado, en La Habana.
Archivado en: