La provincia de Ciego de Ávila necesitaría alrededor de 40 mil viviendas para un déficit habitacional que aunque alarmante no es de los más críticos del país.
Las causas de tal déficit de viviendas se encuentran, según un reporte del periódico oficialista local Invasor, en los estragos de los huracanes y la reducción e incumplimiento desde 2019 de los planes de construcción de viviendas.
Aun así, otras provincias como Santiago de Cuba, Holguín y La Habana tienen una situación más crítica, precisa la información.
La construcción estatal de viviendas se ha reducido de 1,000 hogares al año, hasta la mitad.
En 2021, apenas se logró un 35,2 por ciento del plan, cuando solo 560 casas fueron terminadas en debido a la falta de recursos como el cemento, el acero, los bloques de hormigón y los áridos.
El reporte de Invasor indica que en 2023 las estadísticas indican cierta recuperación “o al menos proyecciones más realistas”.
Un total de 649 casas ya estaban listas al cierre del mes de septiembre de las 1321 propuestas para el año.
Entre estas se han terminado 103 células básicas que benefician a personas vulnerables y 23 casas para madres o tutores con tres o más hijos.
El pasado año, Cuba volvió a incumplir el plan de construcción de viviendas, tras lograr apenas un 58% de su realización. En ese año se terminaron 21,229 casas según cifras oficiales.
La deuda habitacional del régimen cubano se continúa acumulando año tras año. En 2021 el gobierno incumplió en más de un 40% el plan de entrega de casas, pero en lugar de resolver el incumplimiento con más construcciones, se limitó a reducir sus metas para el siguiente año, y también las incumplió.
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