Como mismo tuvo que hacer el sábado anterior, el Inter de Miami saldrá a la guerra sin su jefe de filas cuando enfrente hoy el reto de Atlanta United en ausencia del argentino Lionel Messi.
Tal como era de esperar (el propio técnico Martino lo había dejado entrever en reciente entrevista con The Athletic), Messi no hizo el viaje con el equipo para tomarse un descanso necesario tras intervenir en 12 choques en 48 días y tener que pedir el reemplazo a finales de un encuentro de la selección albiceleste.
Fue entonces que se encendieron las alarmas, aunque afortunadamente los exámenes médicos no detectaron ningún problema muscular. El DT de los 'Herons' no quiere correr riesgos con su estrella y, pese a estar obligado a encadenar victorias para llegar a los playoffs de la MLS, ha preferido darle un aire al veterano de 36 abriles.
Porque lo que se avecina no es poco. El equipo enfrentará siete partidos en 21 días (seis del campeonato estadounidense más la final de la US Open Cup), y aún se halla a seis puntos del corte que determina la presencia en la postemporada.
La presencia de Messi ha sido un indiscutible bálsamo (11 triunfos y un empate sin sombra de fracaso), pero resta camino por andar para escalar las posiciones requeridas en la tabla de una Conferencia Este donde hasta hace muy poco el Inter iba último.
De momento, la escuadra deberá abonarse nuevamente al talkento y esfuerzos de sus otros elementos, encabezados por los exbarcelonistas Sergio Busquets y Jordi Alba y el ecuatoriano Leonardo Campana, pieza clave en el éxito de hace una semana frente a Sporting KC.
Por cierto, Atlanta United -escuadra que Martino llevó al trofeo de la MLS en 2018- fue el segundo rival enfrentado por el Inter tras el arribo de Messi, en duelo de Leagues Cup que se saldó con goleada de 4x0 de los ‘Herons’, a los que el rosarino lideró con un doblete.
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