Economista cubano encuentra "razones políticas" a protesta de Caimanera

Los dos factores determinantes de “la elevada inflación que desde 2021 reduce el bienestar en Cuba… han sido la infra-valoración de salarios y pensiones, y un distorsionado patrón de inversión [enfocado principalmente en el turismo]. Ambas son cuestiones directamente políticas”, sentenció Pedro Monreal.

Caimanera, Guantánamo (Imagen de referencia) © Facebook / Recuerdos y Nostalgias de Cuba
Caimanera, Guantánamo (Imagen de referencia) Foto © Facebook / Recuerdos y Nostalgias de Cuba

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Este artículo es de hace 1 año

Ante la imposibilidad de ocultar las protestas en Cuba, las autoridades del régimen se muestran “comprensivas” con las quejas de la población referidas a la escasez de alimentos, los altos precios o los apagones, problemas que achacan a la “situación económica” del país

Condicionada por la caída del turismo, el “bloqueo” estadounidense y su recrudecimiento con las más de 240 medidas del gobierno de Donald Trump, la crisis de Cuba y su impacto en los ciudadanos no admite razones políticas en el discurso oficial del régimen, dominado por una retórica vacía y por consignas con las que pretenden desviar la atención de su responsabilidad.


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Para el economista Pedro Monreal, “es cuestionable la visión esencialmente ‘económica’ que se escucha sobre las protestas en Cuba” a través de los medio oficialistas y los perfiles de redes sociales afines al régimen.

“Siendo la inflación una queja prominente, entonces la desaprobación que se expresa es inherentemente política”, razonó el experto en un hilo de Twitter en el que explicó la relación que guarda el “desequilibrio directo entre oferta y demanda” con “la naturaleza de la inflación”, que trasciende el ámbito de la economía y se conecta con el ejercicio del poder político y las decisiones de quienes lo detentan.

Según Monreal, las subidas de precios reflejan “la asimetría de poder de los actores”. En el caso de Cuba, donde la economía está mayoritariamente en poder de actores estatales, y sometida al control y planificación del Estado, poco puede hacer “el mercado” entendido como productores independientes y consumidores.

“La divergencia entre los salarios y los precios de los alimentos” en Cuba expresaría entonces la incompatibilidad de las metas del gobierno con las de los productores privados.

En ese sentido, recordó que “el ‘ordenamiento’ [económico] incluyó un intento de modificación masiva de precios relativos que resultó muy distinto a lo anunciado, destruyendo el valor real de los ingresos del trabajo (salarios y pensiones)”.

“El poder estatal determinó principalmente los niveles de salarios y pensiones, sin contrapeso político organizado [sector privado], y simultáneamente redujo a menos de 3% de la inversión nacional en el agro, condicionando una baja oferta de alimentos”, explicó.

Los dos factores determinantes de “la elevada inflación que desde 2021 reduce el bienestar en Cuba… han sido la infra-valoración de salarios y pensiones, y un distorsionado patrón de inversión [enfocado principalmente en el turismo]”, valoró Monreal.

“Ambas son cuestiones directamente políticas”, sentenció el economista en su breve análisis sobre el “factor político” que subyace en las protestas en Cuba, como la protagonizada el sábado por los vecinos de Caimanera, en Guantánamo.

Achacada por las autoridades a disturbios provocados por “tres borrachos”, la espontánea protesta que llevó a cientos de caimanerenses a manifestarse pacíficamente en las calles tuvo entre sus detonantes el hambre y los apagones que sufre la población. Los ciudadanos culpan de ello al gobierno y su autoritario ejercicio del poder; de ahí que en sus manifestaciones se escuchen siempre gritos de “Libertad”.

“Están todos golpeados. Ninguno hizo nada, solo se manifestaron pasivamente. Mi sobrino […] estaba comiendo; un chícharo con gorgojo y un plátano hervido, coño, y salieron porque no aguantaron más”, dijo Victoria Martínez Valdivia, madre de los detenidos Luis Miguel Alarcón Martínez y Felipe Correa Martínez.

Ese miserable plato de comida que llevó a los hermanos a protestar en la calle no es consecuencia del “bloqueo” ni de las más de 240 medidas de Trump.

Su protesta no se explica por “razones económicas”, sino que estas, según Monreal, tienen una "naturaleza política" que el régimen se empecina en descartar, llevando al país a una agonía creciente con tal de no hacer los cambios necesarios y mantenerse así en el poder.

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