Una joven mostró cómo es una sala de cine en Cuba y su video genera casi tres millones de reproducciones y miles de comentarios en redes.
La cubana que se identifica en TikTok como matrioshkacubana mostró cómo es la experiencia de ver una película en una sala de cine en la isla, desde la elección del filme, la compra del boleto de entrada hasta cómo son las butacas de madera donde se sientan los espectadores.
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Su video ya tiene más de 2.6 millones de reproducciones, cerca de 180.000 'me gusta' y superando los 18,000 comentarios.
La joven cubana, que no identifica en su video dónde se ubica el cine que visitó, mostró la cartelera en blanco y negro, con títulos como Ant-Man y la Avispa: Quantumania, Ghosted o Fenómenas, la película que escoge para ver en una sala prácticamente vacía.
También mostró el costo de la entrada, de cinco pesos cubanos, alrededor de unos 20 centavos dólar.
“No me quejaré de Cinépolis”, dice una opinión generada por el video.
Otro internauta comenta que “en Cuba se detuvo el tiempo en los 80”.
“Soy cubana y ese es el más bonito que hay, no quieran ver los otros”, apunta una usuaria de la isla.
En 2018, la fotógrafa italiana Carolina Sandretto, radicada en New York, dio a conocer una serie fotográfica sobre el estado de 398 cines que había en ese momento en la isla, tras pasar cuatro años documentando el prolongado proceso de depauperación por el que atravesaban esos recintos.
"Como nunca tuve un mapa preciso de dónde estaban ubicados los cines o si aún existían, cada uno fue un descubrimiento y un logro en sí mismo", dijo la artista en esa ocasión al portal de exploración urbana, viajes y fotografía Atlas Obscura.
Para ese proyecto, que se convirtió en el libro Cines de Cuba, Sandretto recorrió el país en busca de los cines-teatros restantes, algunos de las cuales seguían en funcionamiento, otros reacondicionados y otros abandonados.
"Entre los años 1900 y 1950, Cuba era una isla próspera que vivía bajo la influencia de los Estados Unidos", explica Sandretto. Según su investigación, para el año 1955 ya existían unas 600 salas de cine en el país y unas 147 en La Habana, “más que París y Nueva York juntas”, aseguró.
Algunos de estos cines fueron financiados por compañías cinematográficas estadounidenses, como el caso del ahora Cine Yara, abierto en 1947 por la Warner Bros.
El Yara es uno de los pocos cines cubanos que permanecen operativos hoy. "Durante los años de la Revolución Cubana, los cines fueron expropiados a sus dueños y han permanecido desde entonces en manos del gobierno", apuntó la fotógrafa italiana.
"Desafortunadamente, los fondos (del gobierno) han sido bastante escasos y mantener una cantidad tan grande de cines ha sido imposible. En los últimos 50 años, casi el 80 por ciento de los cines han sido cerrados", sostuvo, además.
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