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Una cubana encontró una cucaracha en un dulce que compró en La Habana, y al denunciar el hecho, se mostró particularmente indignada por la actitud de la dueña del negocio.
Dinorah González fue con su hija el viernes pasado a la dulcería situada en la Esquina de Tejas y la Calzada de 10 de Octubre, y compraron dos eclears.
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"El de mi hija tenía una cucaracha pegada al chocolate, de lo que se dio cuenta cuando fue a dar la segunda mordida. Regresé a la dulcería y pedí hablar con los dueños, quienes en ese instante no estaban. Un rato después la dueña llegó y su respuesta fue exactamente la frase con que inicia esta publicación: ['El dulce tiene cucarachas, y te tocó a ti, fatalidad']", relató en Facebook.
Según Dinorah, la propietaria del local le dijo que se tenía que poner en su lugar, porque esa era la comida de sus hijos, y le estaba destruyéndose su negocio al decirle a las demás personas que no compraran, y que me tocó la fatalidad a mí de que en el dulce que compré estuviera la cucaracha.
"En todo momento mostró una actitud prepotente y descompuesta, sin mostrar ningún respeto por los derechos que como consumidora me asisten. Ante su actitud, le dije que me quejaré a los canales pertinentes, se mostró burlona, diciendo que podía ir con los inspectores si quería, porque como ella dijo, son los frijoles de sus hijos", detalló.
La cliente recalcó que las personas que manipulan, elaboran o venden alimentos, deben tener la conciencia de mantener la higiene adecuada, y que los órganos supervisores deben ser más rigurosos en el control.
"Hoy fui yo la afectada, mi hija terminó en el hospital con un ataque de pánico y ansiedad que le pudo provocar un infarto, al casi llevarse a la boca el dulce con la cucaracha, podría haber sido cualquiera. No sé a dónde vamos a parar con esta falta de escrúpulos e indolencia de personas como estas, solo prima el interés económico que obtienen jugando con la salud de los clientes", concluyó.
Esta semana un cubano encontró un tornillo dentro del pan que le toca por la cuota de la bodega.
"Admítelo, no esperabas ver en tu timeline una foto de un pedazo de tornillo sacado de un pan", posteó el tuitero cubano conocido como El Ingeniero, con la imagen del pan y un tornillo aparentemente extraído de su interior.
Días atrás, trascendió la denuncia de otra madre cubana que halló un extraño y tóxico contenido en la compota para niños que distribuyen en las bodegas. Al parecer, se trataba de una gruesa capa de moho.
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