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El doctor cubano Alexander Pupo envió un contundente mensaje a sus colegas en la isla, y les pidió no callar ante las desigualdades sociales.
"Si durante la carrera hiciste más pesquisas que prácticas. Si te graduaste y no tienes recursos para trabajar. Si tus pacientes mueren por enfermedades tratables, si cobras menos que un policía y aún así sigues callado, créeme colega, tú si eres un logro de la Revolución", dijo en un mensaje publicado en Twitter.
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El doctor espera poder ejercer nuevamente la Medicina en Estados Unidos, adonde llegó en agosto del pasado año por la frontera con México, tras meses de persecución y presiones de la dictadura cubana.
Desde que llegó a suelo estadounidense, Pupo comenzó a estudiar y a prepararse para revalidar su título de Medicina.
"Tus planes tardarán en realizarse tanto como tú decidas emprenderlos. No importa cuan largo sea el camino, tú eres tu propio motor y tu propia barrera. Medicina voy a por ti", escribió junto a una imagen en la que se le ve estudiando en la computadora.
El doctor Alexander Pupo fue inhabilitado para ejercer la medicina en Cuba por sus ideas política y fue víctima de persecución, amenazas y asesinatos de reputación.
En los últimos meses se han incrementado las denuncias de la grave escasez de medicamentos y de profesionales en los hospitales cubanos.
Sin embargo, el régimen no solo intenta ocultar la escasez, sino que en los últimos casos se ha encargado de "desmentir" la falta de insumos, argumentando que en los hospitales hay "todo lo necesario" para la atención de pacientes.
La semana pasada, luego de que cubanos en redes sociales pidieran medicinas para el actor Rubén Breña, el hospital Hermanos Ameijeiras de La Habana sacó un comunicado afirmando que contaba con todos los recursos para su tratamiento. El artista murió al día siguiente.
En días pasados trascendió que un joven cubano lleva meses esperando ser operado de una hernia que no lo deja ni caminar. No ha podido someterse a la cirugía por falta de recursos, aseguró.
También el caso de niños en Camagüey que no tienen tratamiento para controlar las convulsiones.
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