Miguel Díaz-Canel enfatizó el pasado domingo en que uno de los mayores problemas que genera la creciente migración de cubanos jóvenes es la salida del país de "mujeres en edad de reproducción"; razonamiento que intentó matizar a continuación al decir que se está yendo una parte del pueblo que desde el gobierno quieren que tengan un proyecto de vida en su país.
"Sí nos preocupa, por supuesto, porque se van mujeres en edad de reproducción, para nosotros es muy importante cambiar la dinámica demográfica; se van cubanas y cubanos que queremos que estén aquí, que tengan un proyecto de vida en su país, se nos va fuerza de trabajo calidad", dijo el gobernante en respuesta a una pregunta de la periodista Fabiola López sobre la juventud cubana.
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"Yo siempre pienso que una parte importante regresará porque está es su patria y siempre el cubano por lo general lleva un sentimiento por la patria", dijo también el mandatario, quien apuntó que solo no regresarían los que se van por motivos políticos, que indicó que no es la mayoría.
A pesar de admitir en su respuesta que la creciente migración es un problema en Cuba, Díaz-Canel partió de restar importancia al asunto al insistir que es un fenómeno global, y que no solo atañe a la isla.
"Se habla mucho sobre la emigración cubana, yo creo que hay que hablar sobre la emigración en el mundo entero. A nosotros nos preocupa la cubana pero el mundo entero está viviendo un tema migratorio intenso", indicó.
El gobernante responsabilizó de la crecientes cifras migratorias al "paradigma de sueño americano tejido desde Estados Unidos", y aprovechó para subrayar que la realidad una vez que llegan allí no es tan idílica, y que en las actuales condiciones económicas a nivel mundial "se rompió ese discurso".
"Ahora está llegando la gente y lo que empieza a aparecer son manifestaciones de xenofobia, manifestaciones de discriminación, y se construyen muros, y no se construyen puentes", concluyó.
En febrero de este año el vicejefe de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) de Cuba llamó a no dramatizar el envejecimiento de la población en la Isla, aunque admitió que la caída en el número de nacimientos "no es un tema menor".
Juan Carlos Alfonso Fraga, directivo de la entidad, reconoció en entrevista con la agencia AP que al cierre de 2022 la cifra oficial de cubanos era de 11,089,500, un dato preliminar que no tomó en cuenta los más de 330,000 cubanos que entraron a Estados Unidos por su frontera sur entre octubre de 2021 y diciembre de 2022.
El año pasado nacieron en Cuba 95,402 personas y murieron 129,049, números todavía peores que los de 2021, cuando hubo 99,096 partos y 167,000 muertes.
En contraposición a los datos ofrecidos por el vicejefe del organismo estatal, otros expertos creen que en Cuba hay realmente algo más de 10 millones de habitantes.
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