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El gobierno cubano anunció este martes que prevé un crecimiento mínimo del Producto Interno Bruto (PIB) del 3 % para 2023, una proyección optimista frente a los pronósticos de organismos internacionales, según los cuales la economía de Cuba no crecerá más del 1,8 %.
Alejandro Gil Fernández, viceprimer ministro y titular de Economía y Planificación (MEP), dijo que esta previsión del 3 % será posible "a partir de la reactivación de actividades productivas nacionales y de una mayor captación de divisas por exportaciones", informó el diario oficialista Granma.
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El funcionario afirmó, en un discurso ante los diputados de la Asamblea Nacional del Poder Popular, "que la economía cubana sigue mostrando signos de recuperación, aunque no logra hacerlo a la misma velocidad de la caída que sufrió en 2020, de casi 11 %".
Gil reiteró que "existen condiciones para lograr los objetivos propuestos y que 2023 sea un mejor año", por el "control que ha logrado Cuba de la COVID-19, en los resultados positivos de las recientes giras internacionales" del gobierno y "de la Feria Internacional de La Habana, en la cual se evidenció el creciente interés del empresariado extranjero".
Este mismo discurso lo ofreció Gil en marzo pasado, cuando dijo que la economía cubana iba en recuperación constante y que crecería 4 % este año 2022. Sin embargo, este fin de semana admitió que "el PIB para este año será en torno al 2 %, no alcanzando así los niveles proyectados (4 %)".
Estos vaivenes en los pronósticos, que finalmente siempre van a la baja, hacen que los cubanos desconfíen de las proyecciones optimistas del régimen.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), también fue bajando su previsión económica para Cuba a lo largo del presente año: de 4.1 % estimado la redujo a 2,0 % en 2022, y adelantó que para 2023 la proyección es aún más baja, de 1,8 % o menos.
Según la CEPAL, en 2023 los países de la región se verán nuevamente enfrentados a un contexto internacional desfavorable, en el que se espera una desaceleración tanto del crecimiento como del comercio global, tasas de interés más altas y menor liquidez global.
Los pronósticos de la comisión son apenas un indicativo de las dificultades que tendrá la economía cubana para encaminarse. Gil dijo que "si bien crecieron las exportaciones que se habían previsto en el plan –816 millones de dólares más que el año pasado–, aún estamos muy por debajo de los valores prepandemia", según citó Granma.
Por otra parte, reconoció que aún no se alcanzan los niveles proyectados en dos actividades fundamentales para los ingresos en divisas: el turismo y los servicios de telecomunicaciones; por lo que aseguró que el déficit de divisas sigue siendo la restricción principal de la economía para alcanzar los niveles de 2019.
El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) aseguró recientemente que la mayoría de los habitantes de Cuba viven por debajo del umbral de la pobreza.
Mientras tanto, el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel y el propio Gil lanzan discursos demenciales en los que piden a la población "resistir con creatividad", y aseguran que "Cuba se renueva todo el tiempo".
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