Ariana Mederos González es la primera mujer transexual que estudia medicina en la Facultad de Ciencias Médicas de Matanzas y su principal sueño profesional es especializarse en Endocrinología.
"Estoy muy contenta y emocionada la verdad, pues estos ligeros pasos son significativos para mí", declaró la joven cubana a la emisora oficialista Radio 26, de Matanzas.
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Mederos González, de 22 años, explicó que ha sido fundamental el apoyo de los profesores, que siempre están a su lado y le acompañan en todo el proceso.
"Desde el minuto cero estuvieron presentes, haciendo lo posible para que este sueño fuera real, al claustro directivo de la carrera que en todo momento me dio el sí y estuvieron bien preocupados por mi bienestar", agradeció.
La familia y su novio también son un pilar fundamental en la vida de la joven transexual cubana, que ha tenido que superar los temores propios de una transición como esta y los tabúes de una sociedad que a veces puede llegar a ser intolerante con este tipo de personas, que solo desea ser aceptada como es.
"Y a los amigos que me han tocado, los mejores del mundo mundial, en fin, que gracias", finalizó.
Los derechos de las personas transexuales en Cuba están amparados en el artículo 42 de la Constitución, aunque la sociedad civil independiente exige a las autoridades una ley que "penalice la homofobia, la transfobia", y garantice "el derecho de las personas trans a tener una educación protegida, a tener trabajos dignos", de acuerdo con las declaraciones de Kiriam Gutiérrez a la agencia AFP.
Muchas personas LGBTI depositan su confianza en el Código de las Familias que se encuentra en proceso de aprobación en Cuba, que permitiría el matrimonio igualitario y otros derechos a las minorías sexuales.
Aún así, queda mucho por hacer en Cuba para que la sociedad acepte con normalidad la diversidad sexual y no emita juicios por las preferencias u orientaciones de las personas.
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