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Más de 70 personas se intoxicaron tras ingerir agua potable contaminada en Pinar del Río, según fuentes oficiales.
La Dirección Provincial de Salud y el Centro de Higiene, Epidemiología y Microbiología informaron que en los últimos días se reportó un aumento de las infecciones gastrointestinales de transmisión hídrica, a partir de las intensas lluvias que han caído en el territorio, señala un comunicado oficial del Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP) difundido por el telecentro Tele Pinar.
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"El municipio cabecera incide en esta ocasión, correspondiendo la mayoría de los casos al reparto Hermanos Cruz, con la contaminación de agua potable con aguas albañales y la baja concentración de cloro en la conductora de 36 pulgadas", precisa la nota informativa publicada en su página de Facebook.
Las autoridades sanitarias revelaron que 71 personas necesitaron atención médica, tras presentar síntomas de vómitos y diarreas semipastosas y líquidas.
La información subrayó que se analizaron las muestras y se comprobó que todas han sido negativas al virus del cólera.
Los especialistas aconsejan que cualquier persona con esos síntomas debe acudir al consultorio médico de la familia o al policlínico de su área.
También sugieren hervir el agua antes de consumirla y/o agregar de tres a cuatro gotas por litro de hipoclorito de sodio 1% al agua que se almacena.
Las frecuentes averías y deficiencias del sistema de acueducto y alcantarillado en Cuba han ocasionado hechos de este tipo en otras ocasiones.
En noviembre pasado, unos 70 residentes del consejo popular Centro Sur, pertenecientes al Centro Urbano José Martí, en Santiago de Cuba, se intoxicaron por la contaminación del agua potable con residuos albañales.
El policlínico de la localidad dio la alerta tras la elevada cifra de pacientes aquejados de vómitos, diarreas, fiebre y síntomas de deshidratación.
El periodista oficialista Anolvis Cuscó Tarradel detalló en su cuenta de Facebook que 16 personas padecieron diarreas agudas y otras 70 manifestaron síntomas de enfermedad.
El policlínico de la demarcación tuvo que ser clausurado porque su cisterna recibió también agua contaminada.
Uno de los perjudicados, un joven de 27 años llamado Yunior, sufrió diarreas y malestar general, a pesar de que en su casa se hierve el agua.
"Esa semana pusieron el agua varias veces, y la última estaba turbia. Al principio no distinguimos la diferencia, porque a veces el agua llega así oscura, pero en esta ocasión estaba realmente contaminada. Era agua de zanja llegando por la tubería del agua potable", relató.
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