Un documental que narra la lucha de jóvenes cubanos por legalizar el surf en Cuba se estrenó bajo el título Havana Libre.
La compañía estadounidense Makewild Films, produjo el audiovisual que muestra imágenes históricas, en contraposición con escenas actuales, para reflejar la prohibición y la estigmatización del gobierno cubano hacia los deportes acuáticos, en particular al surf.
El estreno oficial del documental fue a través de la San Francisco Surfrider Foundation el 22 de marzo en el Roxie Theater. Los críticos cinematográficos lo clasificaron como "una historia profundamente conmovedora".
Esta mirada del surf es poco habitual. No se trata de un reportaje técnico, ni estrictamente histórico, ni de divertidas imágenes de surfistas montando olas, sino de una lucha por un cambio de política y por hacer valer el respeto a la diversidad.
El documental muestra cómo el régimen de la isla arresta a los surfistas, por lo que consideran un delito, "montar olas" en la plataforma insular.
Las actividades acuáticas están prohibidas en Cuba desde hace décadas. Son controladas por el gobierno exclusivamente y algunas están disponibles solo para turistas. El surf subsiste en un limbo legal, pero es visto con recelo por las autoridades.
En la reseña que acompaña al Trailer Oficial del documental, publicado en el canal de YouTube 1091 Pictures, señalan que hace unos años era casi imposible ver surfista en las costas cubanas, porque además de estar prohibido el deporte, las aguas estaban muy vigiladas.
Esa realidad cambió gracias al empeño de amantes del surf en Cuba, como los protagonistas de este audiovisual, Frank González Guerra y Yaya Guerrero, que lograron liderar una comunidad de surfistas cubanos.
Recopilar las imágenes del documental tomó seis años de filmación. Se muestran las fórmulas usadas por los cubanos, en medio de las carencias que golpean a la isla, para crear sus propias tablas; los modos en que esquivan el control de las autoridades y algunos de los lugares donde se pueden cazar las mejores olas en Cuba.
Los surfistas cubanos están decidido a luchar por el reconocimiento de este deporte. Un punto de inflexión se dio cuando el surf fue reconocido como deporte oficial de los Juegos Olímpicos de Tokio y cuando los cubanos fueron invitados a competiciones internacionales.
“Algunas personas, ven el surf como algo simple. Para nosotros los surfistas, es lo mejor que tenemos en la vida”, dice Yaya Guerrero en el documental.
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