La compañía hotelera española Meliá abrirá en la costa sur de Cuba un nuevo hotel, el Trinidad Península que tendrá categoría 4 estrellas plus.
El hotel se ubica a 10 kilómetros del Centro Histórico de Trinidad. Operará bajo la modalidad de Todo Incluido. Está previsto que se inaugure en 2023.
El Meliá Trinidad Península se convertirá en la mayor instalación de su tipo en Sancti Spíritus. Aportará 401 habitaciones al polo turístico de la península de Ancón.
En este territorio también están los hoteles Trinidad del Mar, el Ancón y el Costasur, que actualmente ofrecen al turismo internacional unas 650 habitaciones en total.
En un contexto de dura crisis económica como el que enfrentan los cubanos, el medio de prensa oficialista Escambray aseguró que esta inversión será una "importante fuente de empleo y de captación de divisas con fines sociales".
La construcción del hotel está a cargo de la Empresa Mixta TosCuba S. A.. El representante de la obra, Irán Pérez Cruz, señaló que están en la fase de terminación que incluye enchape, carpintería, jardinería, entre otras acciones. El proceso se extenderá por casi un año.
En mayo comenzarán el montaje de los sistemas de electricidad y climatización del recinto. Esta será la primera instalación hotelera de Sancti Spíritus gestionada por Meliá Hotels International.
La obra se inició en 2018 y tuvo que reprogramarse por la demora en la llegada de suministros desde el exterior, durante la pandemia del coronavirus.
TosCuba S. A. destacó que en la estructura de la edificación empleó un alto volumen de hormigón, con más de 35 mil metros cúbicos.
A finales del 2021 Meliá anunció que abriría dos nuevos hoteles en Cuba. Mencionó el Sol Caribe Beach en el balneario de Varadero y otro en Sancti Spíritus que sería el Trinidad Península. Estas instalaciones se suman a los 32 hoteles que tiene la compañía española en la isla.
En marzo de 2022 un grupo de exiliados cubanos en Estados Unidos se manifestó frente al Hotel Meliá de Nueva York para exigir la liberación de los presos políticos cubanos y denunciaron la complicidad de la cadena hotelera con el régimen de la isla.
Explicaron que no acusaban a Meliá de la represión que sufren los cubanos pero sí de "ser cómplice de los represores y carceleros de un pueblo”.
Previamente exiliados de la isla radicados en Europa también habían denunciado a Meliá. Exigieron al grupo hotelero que suspenda sus nuevas inversiones u otras actividades con el gobierno cubano.
En una carta abierta dirigida a la compañía, los exiliados condenaron los negocios de esta importante empresa española en Cuba “por violar los derechos humanos, civiles y políticos de los empleados cubanos y financiar a la dictadura”.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: