Un campesino de la provincia Artemisa fue castigado por la dirección de su cooperativa debido a sus denuncias en redes sociales.
“Hoy fue el día de castigar al Guajiro tuitero. Mis tuits escritos con mucha educación y sin ofender a nadie, tratando de resolver mis problemas como campesino, después de resolverse, ofendieron”, escribió en su cuenta en Twitter el productor de Güira de Melena, Leonel Capote.
Capote recibió una citación firmada por Rafael Leal Piñero, Presidente de la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) “Ubaldo Díaz Fuentes” de ese municipio artemiseño, para que asistiera a la junta directiva de dicha entidad, cuyo objetivo era el “análisis de los incumplimientos en los compromisos de trabajo”.
En su publicación en Twitter Capote señaló: “En mi cooperativa me sentaron en el banquillo de los acusados y me propusieron en la junta de directiva pasar a campesino independiente”.
“Yo pedí el traslado hacia otra CCS, porque hace tiempo me siento disgustado en esa cooperativa. Al final, no podemos expresarnos, pues ofende”, dijo el campesino, quien asegura haber recibido presiones simplemente por compartir a través de las redes sus inquietudes y problemas como productor.
Un usuario en Twitter, Miguel Angel Bring Fernandez, compartió un mensaje de apoyo con el productor: “No te dejes intimidar amigo, sigue tuitiando, con la verdad hasta el final, tu causa es la más justa de todas en estos tiempos, producir en el campo, eso lo va apoyar el mundo entero”.
El internauta considera que la “sugerencia” de la dirección de la CCS a Capote para que pase a campesino independiente no es la adecuada: “Pa´ lante y con todo y no dejes que te saquen así como así de la CCS”, añadió.
El pasado 13 de abril el campesino de Güira de Melena compartía a través de Twitter que sus calabazas no encontraban comprador porque eran bastantes, algo que no se entiende en medio de la crisis alimentaria que se vive en toda Cuba.
En esa oportunidad el productor reflexionó sobre el llamado del gobierno a producir más y sobre las fallas posteriores a las que se enfrentan los campesinos cuando llega el momento de comercializar los productos.
"Instar a los campesinos a: Sembrar más... Producir más... Díaz-Canel, Ministerio de la Agricultura, aquí está mi cosecha. ¿Qué hacemos con ella?", cuestionó.
Tres días después, Capote escribía que gracias a la magia de Twitter había encontrado un destino para la calabaza y la zanahoria cosechadas y una solución a su problema.
“Espero que sirva de lección y no haya que llegar a esto en otra ocasión. Gracias a todos los que me contactaron para ayudarme y dar solución”, denunció el productor.
En otra ocasión Capote denunció, también a través de su cuenta, las medidas rigurosas de calidad que impone el monopolio estatal de Acopio a campesinos como él que son obligados a producir alimentos sin tener acceso a fertilizantes ni productos fitosanitarios que garanticen una mejor calidad de las cosechas.
Todo parece indicar que sus “formas para solucionar los problemas”, sus denuncias y publicaciones en la red social no han sido bien recibidas por la dirección de la CCS.
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