Oscar Casanella a Luis Manuel Otero: "Te quiero vivo y no mártir"

“Te escribo estas líneas como un amigo preocupado, un hermano que quiere volver a verte deseando que lleguen a ti y te convenzan de que la vida siempre es la mejor opción, pues mientras hay vida, hay esperanza de lograr nuestros objetivos”, dijo el científico cubano en Facebook. 

De izquierda a dere3cha, Luis Manuel Otero, Iliana Hernandez y Oscar Casanella © Facebook / Oscar Casanella
De izquierda a dere3cha, Luis Manuel Otero, Iliana Hernandez y Oscar Casanella Foto © Facebook / Oscar Casanella

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El científico cubano Oscar Casanella se sumó este viernes al proyecto Diario para Luisma, en el que han participado activistas, opositores y amigos del artista independiente Luis Manuel Otero Alcántara.

Te escribo estas líneas como un amigo preocupado, un hermano que quiere volver a verte deseando que lleguen a ti y te convenzan de que la vida siempre es la mejor opción, pues mientras hay vida, hay esperanza de lograr nuestros objetivos”, dijo Casanella a través de Facebook.


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El activista, que se exilió con su familia en Estados Unidos tras escapar de Cuba a través de Nicaragua, destacó que Otero Alcántara es un héroe y restó importancia a aquellos que dicen que es necesario inmolarse y dar la vida por una causa.

“Te quiero vivo y no mártir. Tú has hecho mucho por Cuba, pero esta lucha debe ser como una carrera de relevos con muchos atletas que se alternan”, sentenció.

Casanella confesó que prefiere ver al artista cubano con vida en el exilio que muerto en una cárcel y no pierde las esperanzas de reencontrarse con Otero Alcántara en un futuro próximo.

Quiero volver a encontrarnos para conspirar, para planear cómo molestar y burlarnos de los militares y funcionarios del régimen, incluso para discutir acaloradamente como generalmente pasaba y luego hacer las paces gracias al humor”, sentenció.

Esta página del Diario para Luisma sirvió también para que Casanella mostrase los sentimientos encontrados que provoca en él la figura de uno de los líderes más importantes del Movimiento San Isidro.

Por un lado una gran admiración por tu valentía, tu creatividad y tu resistencia, por otro lado me incomoda esa misma resistencia que con frecuencia termina en testarudez, pero no tengo moral para juzgarte pues yo para muchas cosas soy testarudo”, destacó el activista cubano.

El texto del científico cubano mencionó que esa tozudez de Otero Alcántara puede ser cualidad y a la vez un defecto que pone en peligro su vida.

“Si una opción para preservar tu vida y tu libertad es el exilio, por favor Luisma, tómalo”, expresó.

Por último, Casanella mencionó el dolor que provoca el exilio, sobre todo en aquellos cubanos que dedican horas a la lucha por los derechos humanos y la justicia social en Cuba.

El exilio también es un castigo sobre todo para patriotas como nosotros pero es mucho mejor que mantenerte dentro del tubo digestivo del monstruo totalitario que son las cárceles cubanas”, abundó.

El resto del texto lo dedicó Casanella a explicar su proceso de adaptación en Estados Unidos, a donde llegó tras varios días de tránsito por Latinoamérica y exponiéndose a peligros junto a su familia.

“Ahora me siento como un niño pequeño que se asombra con todo lo nuevo que va conociendo. Es duro y difícil empezar Luisma, pero no hay otra opción, sobre todo cuando otras personas dependen de ti”, finalizó.

El comentario de Oscar Casanella ocurre en medio del ayuno intermitente que protagoniza el artista independiente Luis Manuel Otero Alcántara, detenido desde julio del año pasado en una prisión de máxima seguridad de Cuba.

Sobre su caso se han pronunciado organismos internacionale y funcionarios del gobierno de Estados Unidos, preocupados por la salud del creador independiente y la vulnerabilidad de sus derechos humanos.

Lo poco que se sabe de su estancia dentro del recinto penitenciario es cuando familiares y fuentes cercanas establecen comunicación telefónica con el preso político y este envía algún mensaje.

Desde la prisión manifestó su voluntad en llevar hasta el límite su cuerpo como única manera de protestar y exigir justicia por él y el resto de los cubanos detenidos por motivos políticos en Cuba.

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