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El llanto de un padre cubano con sus tres hijos presos por manifestarse el 11J

En el archivo de audio se escucha al padre de los tres jóvenes llorar por la suerte de sus hijos, que enfrentan durísimas penas por el solo “delito” de salir a manifestarse el día de las revueltas que sacudieron el país y sesenta años de historia sin protestas multitudinarias.

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Este artículo es de hace 2 años

El grupo de trabajo sobre detenciones por motivos políticos, Justicia 11J, publicó un audio con las emocionadas palabras de un padre cubano, llorando por las condenas solicitadas por la Fiscalía de Cuba contra sus tres hijos por manifestarse durante las históricas protestas del 11J.

“El llanto del padre de Miyoslan, Yosney y Mackyani “Mamoti” Román Rodríguez, acusados de sedición a 10, 15 y 25 años de privación de libertad para sus dos hijos y para su hija. Otra familia que sacaron en la madrugada de su casa y encarcelaron por manifestarse #11JCuba #SOSCuba”, compartió el grupo este sábado vía Twitter.

En el archivo de audio compartido por el grupo Justicia 11J, se escucha al padre de los tres jóvenes llorar por la suerte de sus hijos, que enfrentan durísimas penas por el solo “delito” de salir a manifestarse el día de las revueltas que sacudieron el país y sesenta años de historia sin protestas multitudinarias.

El 11 de julio, Cuba vivió una jornada histórica cuando cientos de miles de cubanos tomaron las calles de más de sesenta pueblos y ciudades. Entre los lugares que más destacaron por su agitación, la barriada de La Güinera, en el habanero municipio de Arroyo Naranjo, fue el escenario de una multitudinaria protesta contra la que cargaron los represores del régimen cubano, desatándose la violencia y el enfrentamiento entre policías y manifestantes.

En el encontronazo entre ambos grupos resultó asesinado el cubano Diuvis Laurencio Tejeda, vecino de 36 años del habanero barrio de La Güinera, quien falleció a consecuencia de los disparos efectuados por el subteniente Yoennis Pelegrín Hernández.

Llamativamente, la Fiscalía no presentó cargos contra el oficial por considerar que actuó “en legítima defensa”, a pesar de haber disparado por la espalda a Diuvis y no haberse podido demostrar otras “provocaciones y amenazas” que supusiesen un peligro real para los agentes por parte de civiles desarmados.

Entre los manifestantes arrestados en La Güinera está la joven Mackyani “Mamoti” Román Rodríguez, de 23 años, a la que los represores cubanos sacaron de su casa junto a sus hermanos Yosney y Emiyolan en la madrugada del 12 de julio, y para quien la Fiscalía pide 25 años de privación de libertad.

La organización no gubernamental (ONG), Cubalex, reporta el caso de Mackyani en su Listado de detenidos y desaparecidos en Cuba (Julio de 2021), un documento público en el que se recogen los datos de las personas detenidas tras las manifestaciones, así como su situación procesal.

“Arrestada durante las protestas en La Güinera, Arroyo Naranjo, en la Habana. Detenida junto a sus hermanos Yosney y Emiyolan. Fue trasladada a la prisión de 100 y Aldabó. Se encuentra ahí bajo investigación en espera de juicio. Como medida cautelar, los mantienen presos. En los interrogatorios les han preguntado si tienen vínculos con organizaciones extranjeras, particularmente de Miami. Actualmente en la prisión de mujeres El Guatao”, refiere la ONG en su listado.

En cuanto a Yosney Román Rodríguez, de 25 años, Cubalex reseña que también fue detenido tras las protestas en La Güinera y trasladado a 100 y Aldabó. Para él, la Fiscalía solicita una condena de 20 años de privación de libertad.

Por su parte, al menor de los hermanos Román Rodríguez, el joven Emiyoslan, la Fiscalía solicita contra él una condena de 15 años de privación de libertad. El grupo Justicia 11J refirió que al joven “le han propuesto condena luego de cumplir sus 18 años en prisión”.

Las condenas solicitadas para los tres jóvenes, según Justicia 11J, forman parte de una estrategia de la fiscalía provincial de La Habana, cuyos funcionarios públicos al servicio del régimen totalitario han “comenzado a utilizar el delito de sedición con una connotación política para enjuiciar a jóvenes de Arroyo Naranjo”.

“La sedición está siendo usada como delito político contra personas que exigen derechos elementales y que no tienen formación política. La desobediencia civil no es ni sediciosa ni se debe catalogar como vandalismo. Hacerlo es discriminatorio y elitista. El #11JCuba fue espontáneo”, indicó el grupo de la sociedad civil creado para denunciar y visibilizar los casos de represión tras las protestas del 11 de julio.

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Iván León

Licenciado en periodismo. Máster en Diplomacia y RR.II. por la Escuela Diplomática de Madrid. Máster en RR.II. e Integración Europea por la UAB.


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