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Luis Manuel Otero Alcántara denunció en una conexión directa de Facebook que la agresión sufrida este sábado en la noche, no fue el resultado de una acción espontánea de un vecino violento, sino que fue realizada en contubernio con la Seguridad del Estado.
“Si tú no dejas entrar a nadie en esta cuadra cómo va a entrar un tipo con un cubo de botellas”, dice Otero Alcántara en el video grabado por Maykel "Osorbo" Castillo, en el que explica los hechos que sucedieron y las razones por las cuáles se produjo semejante ataque a la sede del Movimiento San Isidro (MSI) en la calle Damas 995.
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Para el grupo de activistas y opositores que se encuentran “plantados” en la sede del MSI el asalto que sufrieron fue obra de la Seguridad del Estado. Con el barrio tomado por la policía y vigilancia en todas las esquinas, solo se explican lo sucedido como parte de un plan para desestabilizar y romper al grupo.
Según contaron Maykel y Luis Manuel en la conexión directa de Facebook, el agresor llamó a la puerta y les dijo que por culpa de ellos estaba el barrio lleno de policías y que le habían fastidiado su negocio ilegal de venta de cervezas. A continuación, cuando Otero Alcántara le cerró la puerta se produjo un forcejeo que terminó con el agresor lanzando botellas y destrozando la puerta de entrada de la vivienda con una pica de albañilería.
En la trifulca, Otero Alcántara terminó lesionado por el impacto de una botella en su cara, que le provocó lesiones en el pómulo y la ceja derecha. Todo el altercado se produjo en una cuadra donde la policía tiene montado un operativo las 24 horas del día y la Seguridad del Estado controla cada desplazamiento y ha prohibido el paso a familiares, amigos y vecinos que se han querido acercar a la sede del MSI.
Alcántara y Maykel sospechan que la intención es provocarlos con este acto para que saliesen a pelearse en la calle con el asaltante. Una vez que esto sucediera, según explica Alcántara, vendrían a detenerles con el pretexto de alterar el orden público, una acusación de la que el régimen siempre echa mano para destruir la reputación y las acciones de los opositores.
“Esa gente está en la esquina por tu culpa”, le dijo el hombre. “Tienes que mudarte de aquí, porque esa gente está en la esquina”, le dijo a Otero Alcántara, e inmediatamente después comenzó a lanzar botellas y a destrozar la puerta que los activistas intentaban cerrar.
“Si ese tipo estuvo 6 minutos aporreando hasta romper la puerta, es porque la seguridad del estado se lo permitió”, dice Maykel en el video, una opinión que comparten todos en el interior de la sede del MSI.
Días atrás, la casa fue objeto también de otra agresión, cuando sujetos lanzaron una sustancia química que actuó como bomba fétida al interior de la casa.
Para Otero Alcántara, nadie se atrevería ante tantos policías que tiene apostados en las esquinas de la calle, a cometer tantos delitos. “Violación de domicilio, agresión, amenaza, y todo con premeditación. ¿Quién tiene los huevos de hacer eso en este país, en una cuadra llena de policías?”, se preguntaba el activista.
Según Maykel, el plan falló por burdo. “Afuera no me van a coger nunca. Aquí estamos plantados”, aseguró. Para él, la maniobra se desplegó después de quitarles la cobertura de teléfonos celulares a los que se encontraban dentro. Pero ellos tenían otras tarjetas prepago preparadas y pudieron grabar y transmitir en vivo toda la agresión sufrida.
“Mañana vamos a meditar con una ronda de poesía. Para que el mundo vea que ustedes entran a casa de poetas a tirarle botellas. Mañana nuevamente te vamos a matar con poesía”, sostuvo el rapero dirigiéndose a los represores.
Luis Manuel Otero Alcántara, líder del Movimiento San Isidro, Maykel “Osorbo” Castillo permanecen en huelga de hambre y sed desde hace cuatro días, mientras que Iliana Hernández, Osmani Pardo y Oscar Casanella, también han dejado de comer, pero beben agua, según reportes de los propios huelguistas, que reclaman la liberación del rapero Denís Solís, condenado a ocho meses de cárcel, en juicio sumario. En las últimas horas Esteban Rodríguez depuso la huelga de sed por problemas de presión pero continúa con la de hambre.
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