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Una recaudación sui generis realizó la asociación belga “Cubanismo.be”, que recolecta fondos para enviar a Cuba, tras la venta de huevos de Pascua el pasado domingo.
Según una publicación en la web de dicha organización, esta venta se realiza anualmente en Semana Santa, y consiste en la venta de “una bolsa (o varias) de deliciosos huevos de Pascua”, la cual ayudará “al pueblo cubano”, aseguran los integrantes de esa asociación cercana al régimen de La Habana.
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Refieren que cobran “5 euros por una bolsa de huevos de Pascua”, y que también venden “bolsas de chocolate fondant, chocolate con leche y chocolate blanco”.
Instan a ayudar a Cuba y piden a las personas que compren “algunas bolsas a familiares, amigos o vecinos”.
Según el secretario nacional de "Cubanismo.be", Kasper Libeert, en conversación con la agencia oficialista Prensa Latina, la intención persigue el objetivo de “despachar hacia la isla un contenedor con insumos médicos en noviembre, que seguiría al enviado a principios de enero, correspondiente a la colecta de fondos realizada el año pasado a propósito de las celebraciones de Pascua”.
Una campaña impulsada desde esta institución alcanzó, en marzo, la suma de siete mil euros, a los que se sumarán el dinero recolectado en otros proyectos, indicó el directivo.
A pesar de su loable labor solidaria, sobre todo en el contexto de crisis y escasez que vive la isla, "Cubanismo.be", es una asociación que se mantiene cercana al gobierno cubano. Tras las protestas ocurridas en varias ciudades cubanas durante 17 y 18 de marzo, los integrantes de esa organización belga se alinearon al discurso oficial de culpar al gobierno de Estados Unidos sobre los motivos de esos eventos.
“Cubanismo.be llama a la solidaridad con Cuba tras los intentos de desestabilización de EE.UU. Cubanismo.be condena enérgicamente el bloqueo y los intentos de desestabilización de EE.UU. para desacreditar a Cuba y fomentar el caos. Cuba respeta el derecho de su pueblo a expresarse y no necesita la injerencia de EEUU”, reza una nota compartida por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba.
Sin embargo, ciudadanos cubanos son detenidos, reprimidos y encarcelados, por ayudar a sus compatriotas, con donaciones que remarcan el esfuerzo que hacen desde la distancia o en la propia isla.
Así sucedió con la activista cubana Yamilka Laffita, conocida como Lara Crofs en redes sociales, quien denunció, hace unos días, amenazas en su contra luego de sus publicaciones sobre la niña cubana Amanda Lemus, cuyo caso dejó en evidencia el colapso del sistema de Salud en la isla.
O las detenciones arbitrarias a las que estuvieron expuestos el cubano Alberto Turís Betancourt Pérez, identificado en Facebook como Generosidad Cristiano Jerusalén, y que salió a recaudar fondos por las calles de La Habana, con el objetivo de apoyar a la niña Amanda, y el periodista independiente camagüeyano José Luis Tan Estrada, a quien la Seguridad del Estado le quitó las donaciones que había recabado para personas necesitadas.
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