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La cantidad de infectados en la Casa Blanca con el nuevo coronavirus aumentó a 33 este lunes, después de que medios estadounidenses confirmaran que otras cinco personas resultaron positivas a las pruebas en la mansión presidencial de Washington.
NBC News confirmó que cinco funcionarios de la administración Trump, entre ellos, funcionarios de campaña, fueron diagnosticados recientemente con la enfermedad. Estos últimos casos provienen de la oficina del vicepresidente y su círculo íntimo.
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Entre finales de septiembre y principios de octubre, se identificaron 28 casos dentro de la órbita del vicepresidente Mike Pence, entre funcionarios de campaña y otros contactos, indica un reporte de Telemundo.
Además, se conoce que al menos 14 de ellos estuvieron presentes el 29 de septiembre en el evento Rose Garden, para la nominación de la jueza Amy Coney Barrett. El martes 13 de octubre, la esposa del secretario del Trabajo, Trish Scalia, que asistió a ese evento, dio positivo al COVID-19.
El jefe de la oficina de seguridad de la Casa Blanca, Crede Bailey, también fue diagnosticado con COVID-19. Igualmente, Stephen Miller, asesor de alto rango del presidente Donald Trump, se sumó el pasado 6 de octubre a la lista de personas contagiadas.
“Durante los pasados cinco días he estado trabajando de forma remota y en aislamiento, arrojando negativo todos los días hasta ayer. Hoy (martes), di positivo a la prueba de COVID-19 y estoy en cuarentena”, comunicó entonces Miller.
A inicios de mes, Trump y la Primera Dama Melania informaron que habían sido infectados con la enfermedad. Hace unas semanas, en un artículo, ella reveló que el hijo de ambos, Barron Trump, también había resultado positivo a las pruebas, aunque venció la enfermedad sin complicaciones.
El matrimonio Trump presuntamente fue contagiado a través de Hope Hicks, una exmodelo y asesora del presidente que tiene acceso directo y sin restricciones al mandatario estadounidense.
Otras personas que se cuentan en la lista de infectados son Kayleigh McEnany, secretaria de prensa de la Casa Blanca, y Ronna McDaniel, presidenta de la Convención Nacional Republicana, así como Bill Stepien, director de campaña de reelección del presidente, entre otros más.
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