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El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, ha enviado un mensaje al presidente norteamericano Donald Trump, en el que le desea que tanto él como la Primera Dama Melania se recuperen pronto del coronavirus, informó este sábado la agencia estatal coreana KCNA.
En la misiva, que se dio a conocer un día después de que Trump informara de su contagio, Kim transmitió una muestra de "simpatía" a la pareja presidencia del Estados Unidos, les deseó que se recuperasen "lo antes posible" y se mostró convencido de que "lo superarán", según los detalles publicados por la mencionada agencia.
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Es la primera vez que el dictador norcoreano envía un mensaje de este tipo a un mandatario que ha contraído la COVID-19, entre los que también estuvieron el primer ministro británico, Boris Johnson, o el presidente brasileño, Jair Bolsonaro.
Las relaciones entre Trump y Kim mejoraron de repente a partir de junio de 2018, con tres encuentros cara a cara. Sin embargo, estas conversaciones no han desembocado en resultados concretos sobre la desnuclearización de Corea del Norte, que sigue representando un serio peligro para la región.
El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, aseguró a mediados de septiembre que las negociaciones proseguían entre bastidores. Trump presenta su estrecha relación personal con el dictador norcoreano como uno de sus logros en política exterior.
En abril, Trump desmintió rumores sobre la salud del líder norcoreano aunque se negó a decir si había estado en contacto con funcionarios del aislado país de gobierno comunista.
"Tenemos una buena relación con Corea del Norte, tengo una buena relación con Kim Jong-un y espero que esté bien", señaló.
El presidente ha recibido en las últimas horas mensajes de personalidades de todo el mundo, incluidos varios adversarios políticos como el presidente ruso Vladímir Putin, deseándole una pronta recuperación.
El gobierno cubano, sin embargo, no ha hecho pronunciamiento alguno.
Trump y su esposa se hicieron la prueba de la COVID-19 después de que este jueves se conociera el positivo en la enfermedad de una de las asesoras más cercanas del presidente, Hope Hicks.
Aunque inicialmente se señaló que la pareja presidencial de EE.UU. pasaría la convalecencia en la Casa Blanca, posteriormente se decidió trasladar a Trump a un hospital militar "por precaución".
El presidente, de 74 años, reúne varios de los factores de riesgo para desarrollar síntomas más graves de COVID-19, debido a su edad, su género y la obesidad que padece.
Minutos después de partir hacia el centro médico, Trump compartió un vídeo a través de Twitter en el que afirmó: "Creo que estoy muy bien, pero vamos a asegurarnos de que las cosas funcionan".
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