El Consejo de Defensa Provincial (CDP) informó de la imposición de más de 10 400 multas en La Habana en una reunión celebrada ayer, según recoge el diario Tribuna de La Habana.
Desde la puesta en marcha del “sistema de inspección” que pretende detectar y sancionar infracciones “por incumplimiento de normas de bioseguridad”, en La Habana se han impuesto “10 487 multas, de las cuales 939 duplicaron sus importes por no pagarse en el término establecido”.
En la reunión, en la que también se trataron otros temas relacionados con la situación epidemiológica provocada por el COVID-19, “se orientó visitar a los infractores con el fin de conocer la causa de los impagos”. El objetivo es que nadie incumpla con el pago y se vea en situación de pagar el doble de la cuantía.
Con esta orientación se pretende establecer compromisos con los 939 casos de impagos “para cumplir con la ley, sin necesidad de llegar a un proceso judicial”. Para tales casos, se aprobó la solución “del pago a plazo de los adeudos”.
Esta solución de los pagos a plazos también podría aplicarse a personas con bajos ingresos que resultasen sancionadas. También se estudia la posible reducción de la multa si se paga rápido. Todas estas medidas no afectan a las cuantías de las multas, consideradas excesivas por la población.
Según el presidente del Tribunal Provincial Popular de La Habana, Yojanier Sierra Infante, el decreto 14/20 tiene como función principal la prevención y cuenta con “medidas coercitivas rigurosas” que impiden la impunidad.
Tales medidas coercitivas habrían permitido que el gobierno de la provincia haya recaudado más de 20 millones de pesos desde el 1 de septiembre, fecha en la que el decreto entró en vigor. El gobierno justifica el uso de estas sanciones por la situación epidemiológica que vive hoy la capital cubana.
Solo en el primer día de entrada en vigor de este Decreto, en La Habana se aplicaron 651 sanciones por incumplir las medidas establecidas de control epidemiológico. Se aplicaron 428 multas de 2000 pesos por no usar el nasobuco y 4 por valor de 3000 pesos en instituciones que no habilitaron los pasos podálicos embebidos en hipoclorito al 0,5%, a la entrada de áreas comunes.
Mientras la situación epidemiológica en La Habana no mejora y, a su vez, empeora la distribución de productos de primera necesidad, el CDP de la provincia también hace un llamamiento “al ahorro de energía eléctrica, tanto en el sector privado, como en el estatal”, lo cual, aunque no se especifica en la nota publicada, podría traducirse en un aumento de los cortes de suministro eléctrico que ya afectan a la capital.
Por su parte, mientras aumenta la mano dura del gobierno con estas medidas, los habaneros y el resto de ciudadanos de la isla empiezan a manifestar de manera creciente su malestar con las mismas y con la situación crítica que se vive en los hogares cubanos.
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