El futbolista argentino Leo Messi anunció este viernes que se queda en el Fútbol Club Barcelona tras 10 días de polémica con ese equipo y la Liga Española por su manifiesto y público interés de irse.
"Voy a seguir en el Barça y mi actitud no va a cambiar por más que me haya querido ir. Voy a dar lo mejor. Siempre quiero ganar, soy competitivo y no me gusta perder a nada. Siempre quiero lo mejor para el club, para el vestuario y para mí", dijo Messi al medio Goal desde su casa en Castelldefels.
El argentino seguirá una temporada más con el FC Barcelona, pero no ocultó durante la entrevista su desencuentro con el presidente Josep Maria Bartomeu, a quien le lleva diciendo todo el año que quería irse. Sin embargo, el club le respondió con la cláusula de su contrato que lo obliga a pagar 700 millones de euros.
"No vino a causa del resultado de Champions ante el Bayern (8-2), la decisión llevaba pensándola mucho tiempo. Se lo dije al presidente y bueno, el presidente siempre dijo que yo al final de temporada podía decidir si me quería ir o si me quería quedar y al final no terminó cumpliendo su palabra", afirmó Messi.
El argentino lamenta que el presidente se agarrara de que no lo dijo "antes del 10 de junio cuando resulta que el 10 de junio estábamos compitiendo por la Liga en mitad del virus este de mierda y de esta enfermedad que alteró todas las fechas. Y este el motivo por el que voy a seguir en el club".
Messi señaló que nunca iría a juicio contra el Barça "porque es el club que amo, que me dio todo desde que llegué, es el club de mi vida, tengo hecha aquí mi vida, el Barça me dio todo y yo le di todo, jamás se me pasó por la cabeza llevar al Barça a juicio. Ahora voy a seguir en el club porque el presidente me dijo que la única manera de marcharme era pagar la cláusula de 700 millones, que eso es imposible, y que luego había otra manera que era ir a juicio".
La Liga apoyó al Barça frente a los intentos de Messi de buscar nuevos caminos.
El futbolista confesó que le dolió todo lo que se dijo en su contra durante estos días y en particular que pusieran en duda su amor por el Barça. "Esto que ha pasado me ha servido para reconocer a mucha gente falsa que tenía en otra consideración. Por más que me vaya o me quede, mi amor por el Barça no va a cambiar nunca", aseguró.
Ante los rumores de que se quería ir del club español por dinero, recordó que cada año se pudo ir y cobrar más dinero en otros lugares, pero en el Barça se sentía como en casa, pero "hace tiempo que no hay proyecto ni hay nada, se van haciendo malabares y van tapando agujeros a medida que van pasando las cosas", señaló.
Messi cuenta que cuando comunicó su decisión a su familia, su esposa Antonella y su hijos no querían irse de Barcelona, ni dejar sus escuelas. "Mi mujer con todo el dolor del alma me apoyaba y acompañaba". Su hijo pequeño Thiago no se dio cuenta, pero Mateo sí y lloró para no irse.
El futbolista agrega que este último año no encontró la felicidad dentro del club y quería terminar sus últimos tiempos como futbolista en otro sitio.
"Ahora no sé qué va a pasar. Hay un entrenador nuevo y una idea nueva. Eso es bueno, pero después hay que ver cómo responde el equipo y si nos va a dar o no para competir. Yo lo que puedo decir es que me quedo y voy a dar el máximo", apuntó Leo Messi quien concluyó con palabras para Bartomeu.
"El presidente siempre me dijo ‘cuando acabe la temporada decides si te quedas o te vas’, nunca puso fecha, y bueno, simplemente era hacerle oficial al club que no seguía, pero no para entrar en una pelea porque yo no quería pelearme con el club", reiteró en referencia al burofax.
La decisión se produce después de que su padre y agente Jorge Messi llegara a Barcelona para intentar cerrar la salida del futbolista argentino.
Al final Lionel Messi seguirá un año más en el Barça, al menos hasta el 30 de junio de 2021. Pese a sus declaraciones de que dará "lo mejor", los medios especializados dudan de su liderazgo en un equipo en el que ya evidenció que no se sentía feliz.
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