La policía cubana decomisó gran cantidad de materiales de construcción a un plomero en la provincia de Guantánamo.
Según un reporte del Noticiero Nacional de la Televisión Cubana, el plomero tenía en su "casa-almacén" muchas piezas y más de 200 tubos de instalaciones hidráulicas.
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El plomero, identificado como Yusmel Arencibia, declaró que "esos productos tienen más de cinco años conmigo".
También dijo que dichos materiales los ha ido comprando porque "se dedica a la plomería" y son importantes para hacer su trabajo.
Los oficiales de la policía encontraron en el domicilio, además, "grandes cantidades" de cajas de cigarros, jabones y otros productos.
Un oficial de la policía dijo que este hecho se consideraba una actividad económicamente ilícita, y los productos serán trasladados a un centro de decomiso para investigar su procedencia.
Esta misma semana, la policía cubana decomisó en La Habana cientos de piezas de repuesto de automóviles y más de un millón de pesos -en diferentes monedas- a un trabajador por cuenta propia del Cotorro.
Según oficiales del Ministerio del Interior, algunas piezas se importaron al país a través de la Aduana, otras fueron compradas en Revolico y el pequeño empresario también hacía de intermediario en la compra-venta de piezas y complementos para vehículos entre sus clientes.
En los últimas semanas se ha hecho habitual que la Televisión Cubana publique casos de decomisos a lo largo de la Isla, una especie de cacería ilegalidades contra los cuentapropistas y la actividad económica independiente en el país.
Estos decomisos se han hecho más frecuentes durante la cuarentena por coronavirus y tienen el fin de brindar una supuesta lección a la población, que debe lidiar cada día con el desabastecimiento y la escasez.
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