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Una madre cubana denunció en redes sociales que fue multada por la policía cuando se dirigía al policlínico a vacunar a su hija de cinco meses durante la pandemia del coronavirus.
La multa, de 150 pesos, fue impuesta por los agentes que el gobierno ha desplegado para velar por que se cumplan las medidas de aislamiento mientras dure la crisis sanitaria.
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Sin embargo, Liannys Ramírez asegura que ella y su acompañante (Rogelio Arias) llevaban una autorización de su doctora, quien les explicó que con el papel de la vacuna los dejarían pasar por el punto de control en la moto, para no tener que ir caminando desde Saigón, en Nueva Gerona, hasta el Policlínico 1 (aproximadamente 2 kilómetros) exponiendo a su hija al COVID-19.
"Aquí les muestro el abuso diario con el pueblo, hoy en la mañana me dirijo hacia el punto de revisión del puente en Nueva Gerona para pasar hacia el Policlínico 1 a vacunar a mi hija de 5 meses con un papel de mi doctora, que me dijo que con el papel de la vacuna me dejaban pasar en la motorina para no tener que ir caminando desde Saigón hasta el Pol 1 exponiendo a mi hija a todo lo que hay en la calle", explicó en su post de Facebook.
Asimismo, afirmó que hace responsable al policía de que su hija no se ponga la vacuna, y consideró el procedimiento como una "muestra del abuso y el atropello diario que hay contra el pueblo".
Explicó que las autoridades "ahora se arreguindan del COVID-19 para sobrecumplir el plan de multas, como si en Cuba hubiera tanto dinero para estárselo regalando a este cochino país abusador y explotador de su pueblo".
Comentó Ramírez que "la justificación (para aplicarle la multa) es que están protegiendo al pueblo".
"¿Qué pueblo? si hubieran querido proteger al pueblo hubieran cerrado todos los aeropuertos antes que entrara en virus a Cuba; pero no, el turismo está primero para ahora estar explotando a las personas. ¿Hasta cuándo va a ser el abuso con el pueblo?", se cuestiona la mujer.
El gobierno cubano ha orientado desde el pasado mes de marzo mantener el aislamiento social y la disciplina para evitar los contagios con el nuevo coronavirus, y han hecho uso del delito de "propagación de la pandemia" para multar y hasta enjuiciar a diferentes personas, entre ellas personalidades contestatarias de la cultura, como el rapero cubano Maikel Castillo Pérez (a.k.a. Maykel Osorbo), quien fue detenido hace unos días y acusado bajo esos cargos.
Este jueves también está siendo sometido a juicio el artista plástico tunero Sacramento José Acebo Hidalgo, por no dejar que un inspector de la campaña contra el mosquito Aedes Aegypti inspeccionara su vivienda durante la cuarentena. El también diseñador es ahora acusado, paradójicamente, de desobediencia y propagación de COVID-19.
Micaela Roll, miembro del grupo opositor Damas de Blanco, denunció que el lunes la policía le impuso una multa de 300 pesos por quitarse el nasobuco o cubrebocas en una cola en Calabazar, provincia de La Habana.
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