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Una mujer en Cuba fue víctima de un episodio de brutalidad policial al parecer por filmar con su teléfono celular una de las tantas colas para comprar alimentos en la isla.
En un breve vídeo, difundido en redes sociales, se ve a la mujer gritando y forcejeando con un policía muy corpulento que intenta quitarle el teléfono, hasta que finalmente el oficial consigue arrebatarle el aparato a la mujer, mucho más pequeña y menuda que él.
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En las imágenes se puede ver a otro hombre que intenta separar a la agredida del policía, mientras un grupo de personas son testigos del violento incidente.
"Aumenta la represión con el #CoronavirusChino La Dictadura trata de esconder la situación actual con multas con prisión y Represión. Hasta cuándo el mundo libre dejará que el @PartidoPCC siga manejando #Cuba como un Barracón de Esclavos?", escribió el usuario que compartió las imágenes en Twitter, que acompañó su publicación de los hashtags #YoSoyElQueAcusa y #SOSCUBA.
No hay detalles de dónde habría ocurrido el incidente, aunque en realidad eso no es lo más importante en un episodio que se suma a una creciente ola de represión, denunciada de forma creciente a través de la redes sociales.
La represión va tomando muy variadas formas en las últimas semanas en la isla, todo ello marcado por el tenso contexto de expansión del coronavirus en el país.
En ese marco, las autoridades cubanas se han puesto especialmente sensibles con la proliferación de imágenes en las redes sociales de las irrefrenables colas para comprar alimentos a todo lo largo y ancho del país, algo que el gobierno critica pero que al mismo tiempo no consigue contener.
El coronavirus ha dejado ya varios episodios represivos en las últimas semanas. A finales de marzo, el activista cubano LGBTI+, Jancel Moreno, denunció que la policía le impidió trasmitir en vivo sobre las medidas gubernamentales para frenar el brote de coronavirus en Cuba.
Moreno explicó que estaba trasmitiendo en vivo para el medio independiente ADN Cuba, desde Matanzas, cuando varios oficiales presentes en el lugar interrumpieron su trabajo.
Unos días después, a comienzos de abril, el youtuber Alain Rodríguez -conocido como Paparazzi Cubano- denunció en Facebook el arresto y posterior imposición de una multa a su hermano, simplemente por grabar con su teléfono un mensaje que estaba dando con un altavoz policía motorizado, acerca de extremar las medidas de seguridad ante el coronavirus.
A esos episodios se suma el amparo legal que está buscando el gobierno cubano para ejercer la represión. La pasada semana anunció que castigará con hasta 4 años de cárcel a las personas que difundan noticias falsas o predicciones maliciosas sobre el coronavirus, todo ello motivado por la circulación de algunos audios que el gobierno ha considerado perniciosos de cara a la opinión pública, en lo relativo a la delicada situación de salud pública que atraviesa el país.
El gobierno también advirtió recientemente que los cubanos que incumplan con las medidas sanitarias impuestas ante la crisis del coronavirus, podrían sufrir privación de libertad de tres meses a un año, o multa de cien a 300 cuotas o ambas.
Las autoridades cubanas también han estado multando con 3000 pesos a quienes hagan publicaciones en las redes sociales contra el gobierno, para ello se apoyan en el Artículo 68 del Decreto Ley 370, publicado en la Gaceta de Cuba el 4 de julio de 2019, que regula las publicaciones de los cubanos en las redes sociales.
Mientras tanto, el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) informó este miércoles que se registraron 48 casos nuevos de coronavirus en el país, lo que eleva el total de casos confirmados a 814, de ellos 24 han fallecido.
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