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En el Mercado de Cuatro Caminos subieron los precios de los productos del agro en medio de la crisis por coronavirus en Cuba. La reacción de la población a este abuso obligó a que se presentara la policía y el gerente.
Los clientes del Mercado de Cuatro Camino detectaron este miércoles que los vendedores estaban multando el precio de los productos agrícolas. Las protestas subieron de tono inmediatamente.
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El video que acompaña esta información lo grabó un cliente que asegura que al subir el valor de todas las mercancías que había en el agro la gente comenzó a protestar.
“Los precios están topados por el Estado. Todo el mundo sabe cuáles son los precios de las cosas. La gente dio tremendo bateo y llamaron a la policía. Tuvo que bajar el gerente del mercado a dar respuestas. Eso es lo que pasa aquí ahora mismo: Subieron los precios", aseguró el cliente.
El desabastecimiento en la red comercial es severo y muchos productos tienen precios que son difíciles de pagar por el pueblo trabajador. A esto se suma que en algunos lugares multan los productos para sacar más dinero a la población en medio de la crisis.
La reacción de los clientes muchas veces se vuelve violenta, por la desesperación que genera no tener certeza de alcanzar los productos alimenticios.
Las colas y aglomeraciones para comprar alimentos en Cuba no cesan a pesar de la importancia del distanciamiento social en una crisis sanitaria como la que vive el mundo frente al coronavirus.
Este jueves hubo una gran protesta en la tienda La Borla, situada en la calle Galiano cerca de su intersección con Reina, Centro Habana. Decenas de cubanos reunidos en una cola para comprar pollo comenzaron a alterarse y protestas lanzando incluso piedras.
La policía intervino y comenzó a rociar spray en el lugar mientras se escuchaban gritos de protesta.
El Estado cubano ha pedido a la población que evite aglomeraciones y hagan colas organizadas con la distancia requerida entre personas, pero es una misión imposible para el pueblo cubano.
En Cuba se redobló la presencia policial en los establecimientos comerciales. La medida está dirigida a preservar también la vida de las personas, según declaró el primer ministro cubano Manuel Marrero.
Las colas más complicadas son para comprar pollo, pues este es uno de los alimentos que más escasea a pesar de ser esencial en la dieta del cubano, especialmente para hacer sopas en tiempos de enfermedades como los que se pueden avecinar.
Los casos de coronavirus en Cuba continúan aumentando, después de que el país diera a conocer de modo oficial los primeros enfermos el 11 de marzo. Dos personas fallecieron por esta causa y 67 se han diagnosticado positivos al COVID-19.
Una de las medidas más importantes para frenar el crecimiento de la pandemia es el aislamiento social, pero la población cubana no puede evitar hacer las colas porque muchos no consiguen acumular alimentos que les permita encerrarse en casa.
Por otra parte, los conflictos en las colas en el Mercado de Cuatro Caminos no dejan de reportarse desde que fue reinaugurado, en saludo al 500 aniversario de La Habana y tras seis largos años de cierre de sus servicios.
Este mercado es de 1920. Siempre se caracterizó por estar surtido con todo tipo de productos, sobre todo alimentos frescos, por lo que está en el imaginario popular como un lugar de preferencia para comprar comida en La Habana.
Las colas se han vuelto algo común y desproporcionado en este establecimiento comercial. Muchas veces no se logran controlar ni siquiera con presencia de la policía.
Un ejemplo de ello se puedo ver en la propia reinauguración que ha pasado al imaginario popular como la Batalla de Cuatro Caminos y ocurrió hace solo 4 meses. Tras este triste episodio el Mercado de Cuatro Caminos quedó completamente destrozado y tuvo que cerrar para acciones de mantenimiento.
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