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China inició el primer ensayo clínico de la nueva vacuna contra el coronavirus con un centenar de voluntarios, según informaron el lunes las autoridades del país a través de un comunicado.
El ensayo se está llevando a cabo en 108 adultos que no están contagiados y cuyas edades oscilan entre los 18 y 60 años.
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Las pruebas se realizan en dos centros médicos situados en el antiguo epicentro del virus, Wuhan, provincia de Hubei. La previsión es que las pruebas estén completadas antes del 31 de diciembre.
El equipo de científicos, dirigidos por el bioingeniero mayor general Chen Wei, llevan trabajando en la vacuna desde finales de enero.
Como vacuna subunitaria contiene solo un fragmento del patógeno para estimular una respuesta inmunitaria protectora.
El pasado 17 de marzo los funcionarios de salud del gigante asiático revelaron que habían dado luz verde a los experimentos en humanos. Según comunicaron la vacuna estaba preparada para llevar a cabo "una producción a gran escala, segura y efectiva" y de acuerdo a los "estándares internacionales".
Los científicos de todo el mundo han iniciado una carrera a contrarreloj para desarrollar una vacuna, mientras que el coronavirus sigue causando miles de muertes en todo el mundo.
Asimismo científicos de Singapur explicaron que han desarrollado una forma para rastrear cambios genéticos que aceleran las pruebas de vacunas contra el virus, que ha acabo con la vida de más de 16 mil personas.
Los científicos, de la Escuela de Medicina Duke-NUS de la ciudad estado, dicen que su nueva técnica sólo requiere de días para evaluar potenciales vacunas provistas por Arcturus Therapeutics, una firma de biotecnología estadounidense que se ha asociado con la escuela para las pruebas.
"Puedes saber por la forma en que los genes cambian, cuáles genes están encendidos y cuáles están apagados", dijo Ooi Eng Eong, vicedirector del programa de enfermedades infecciosas emergentes de la escuela.
China registró 78 nuevos casos
Por otro lado la provincia china de Hubei levantará restricciones de viaje a las personas que dejen el área, mientras va menguando la enfermedad, pero otras regiones reforzarán los controles luego de que las infecciones importadas hicieron que se duplicaran los nuevos casos del país.
La Comisión de Salud de Hubei anunció que levantará los impedimentos a la salida de personas a partir del 25 de marzo, siempre que tengan un código de autorización sanitaria. Los vetos de viaje de Wuhan, capital de la provincia, totalmente aislada desde el 23 de enero, se eliminarán el 8 de abril.
China registró 78 nuevos casos el lunes, según dijo la Comisión Nacional de Salud, el doble que la cifra informada el domingo. De los nuevos casos, 74 fueron importados, frente a los 39 casos provenientes del extranjero del día anterior.
Pekín tuvo la cifra récord de 31 nuevos casos importados, Guangdong informó 14 y Shanghái, nueve, con un total de casos importados era de 427 al lunes. Sólo cuatro nuevos casos fueron transmisiones locales, uno de ellos en Wuhan, que llevaba cinco días sin registrar una nueva infección.
La epidemia ha dañado todos los sectores de la economía, desde las manufacturas al turismo. Para persuadir a los negocios a que reabran, el gobierno ha ofrecido créditos, ayudas y subsidios.
Según Reuters, en la empobrecida provincia de Gansu, a los funcionarios del gobierno se les demanda que gasten al menos 200 yuanes (28,25 dólares).
La pandemia ha obligado a posponer un años los Juegos Olímpicos que iban a celebrarse este verano en 2020.
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