El gobierno de Cuba anunció la "suspensión, posposición o conmemoración en una composición reducida" de los actos y eventos políticos y de masas de carácter nacional, territorial o local previstos por el Buró Político hasta el mes de julio, para evitar la concentración de personas durante la crisis del coronavirus.
Se suspenden todas las actividades de la Unión de Jóvenes Comunistas, incluido su XI Congreso, y también del resto de las organizaciones de masas y sociales y de los comités municipales y provinciales del partido, indica una nota publicada este jueves por el diario oficialista Granma.
En cuanto a las efemérides y conmemoraciones de carácter histórico, se realizarán con un número reducido de personas, "sin movilización de masas", y se difundirán por los medios de comunicación masiva.
En referencia al desfile del Primero de Mayo y el acto por el 26 de Julio, celebraciones de gran magnitud para el gobierno cubano, el Buró Político informará más adelante qué decisión se adoptará.
Esta es una de las pocas medidas que ha tomado el gobierno de Cuba frente a la creciente pandemia de coronavirus, que ya ha cobrado la vida de más de 10 000 personas en todo el mundo.
A ella se suma la suspensión de actividades culturales y recreativas de carácter masivo por el Ministerio de Cultura, "para proteger a la población y cooperar con la prevención y el enfrentamiento al coronavirus"; lo cual no se ha cumplido a cabalidad en todas las provincias, según denuncias de varios usuarios a CiberCuba. Por ejemplo, en el municipio de Buenaventura, en Holguín, las autoridades no suspendieron los carnavales el pasado fin de semana, a pesar de que los propios ciudadanos lo estaban pidiendo.
Miles de cubanos también están demandando a través de las redes sociales el cierre de los aeropuertos en todo el país y que no se siga permitiendo la entrada a extranjeros e importando nuevos casos de COVID-19.
Incluso, rostros conocidos de la industria artística cubana han alzado sus voces a través de las plataformas virtuales para pedir el cierre inmediato de las fronteras y exigir que se proteja al pueblo de futuros contagios. A este reclamo se han sumado las actrices Luisa María Jiménez y Blanca Rosa Blanco, y los músicos Baby Lores, Randy Malcom y Luis Barbería, entre otros.
También artistas y otros cubanos que viven fuera de la isla están alertando sobre la situación mundial a quienes residen en el país, comparten las experiencias que se están viviendo en otras naciones por no aplicar y cumplir las medidas a tiempo, y exhortan a la gente en Cuba a que se cuiden ellos mismos.
El régimen tampoco ha considerado cerrar escuelas, universidades o círculos infantiles, pues las medidas drásticas contra la propagación del coronavirus se consideran "innecesarias por el momento".
Cuba ya tiene 16 casos de coronavirus confirmados y más de 300 sospechosos. Los casos positivos son atendidos en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK) y de acuerdo con los informes de Salud Pública, hasta el momento todos los contagiados evolucionan de manera satisfactoria.
Los últimos cinco casos reportados este jueves son un francés de 69 años, que llegó de París a Granma el 9 de marzo; un italiano de 70 años, que arribó de Lombardía el mismo día y estuvo en contacto con los primeros italianos reportados como positivos; una cubana que llegó desde Roma a Santiago de Cuba el sábado 14; un ciudadano español de 34 años, que viajó desde Madrid el día 13; y un canadiense de 81 años, que llegó de Montreal el martes 10; estos dos últimos se hospedaban en La Habana.
Este miércoles, se registró la muerte del paciente de nacionalidad italiana de 61 años de edad, la primera por coronavirus en Cuba. El hombre era uno de los tres primeros casos reportados por Cuba y se encontraba ingresado en la sala de terapia intensiva del IPK en estado crítico, tras un agravamiento de los síntomas respiratorios debido a su padecimiento de asma bronquial.
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